Pagode (Brasil)
¿Quién no ha visto alguna vez a Neymar, a Dani Alves, Marcelo o cualquier otro futbolista brasileño concentradísimo antes de un partido escuchando música? Las imágenes de los cracks de Brasil bajando del colectivo con unos auriculares enormes son el pan nuestro de cada día. Seguro que muchos se habrán preguntado qué estarán escuchando, ¿o no?
Pues bien, la música favorita
de los jugadores de fútbol de Brasil es el Pagode. Se trata de un género
musical nacido de la Samba. La historia del Pagode
tiene sus orígenes en Río de Janeiro, entre finales de los años 1970 y
principios de los años 1980, a partir de la tradición de los círculos de Samba
realizados en “patios traseros”. El término “pagode” está presente en el
lenguaje musical brasileño al menos desde el siglo XIX. Inicialmente se asoció
a las fiestas que se celebraban en las casas de esclavos y, posteriormente,
pasó a ser sinónimo de cualquier fiesta llena de alegría, bebida y canto. Con
el tiempo, el término “pagode” comenzó a usarse como sinónimo de Samba,
debido a que los artistas de Samba usaban este nombre para sus
fiestas o sus pagodas. En el aspecto musical, el Pagode nació precisamente
de esta manifestación popular completamente marginal a los eventos musicales de
los grandes medios brasileños. A partir del surgimiento de una nueva generación
de Samba
en Río de Janeiro en los años 80, provenientes de estas pagodas y que innovaron
la forma de hacer Samba, el término “pagoda” bautizó espontáneamente al nuevo
estilo musical derivado de la Samba. En el pasado, la pagode se
consideraba una fiesta de esclavos en los barrios de esclavos negros y
quilombos. A mediados del siglo XIX, el término comenzó a designar reuniones
para compartir amistades, música, comida y bebida. Luego, con el
establecimiento de la Lei Áurea y la abolición de la esclavitud y el
asentamiento de negros libres en Río de Janeiro, sintieron la necesidad de
construir una identidad. De esta manera, las fiestas llenas de comida, bebida y
música comenzaron a convertirse en una costumbre cada vez más común en las
afueras de Río. La Pagode se consolidó a partir del siglo XX como una necesidad de
compartir. y construir identidad de un pueblo recién liberado, y que necesitaba
darle otra función al cuerpo que hasta entonces era sólo un instrumento de
trabajo.
De ahí la estrecha relación entre la música y la danza en la cultura
de origen africano. Malandragem y las colinas de Río dieron origen a Pagodas, y
en la década de 1970, el término estaba estrechamente asociado con fiestas en
casas, generalmente en patios traseros, y en manzanas de los suburbios y
favelas de Río y en las veredas de bares en el centro de Río, regadas con
tragos y mucha Samba. El Pagode, como manifestación cultural,
apareció recién en los medios en 1978, cuando los cantantes Tim
Maia y Beth Carvalho fueron a visitar la corte del Cacique de Ramos,
un bloco de carnaval en el barrio de Ramos, en los suburbios de Río. El bloco
era un lugar popular para bailarines de Samba y jugadores de fútbol
anónimos, que se reunían los fines de semana para comer, beber y cantar. Por
invitación del exfutbolista Alcir Portela, Beth Carvalho fue a conocer a un
grupo de músicos de Samba conocido como Fundo de Quintal, grupo que incluía
a uno de sus vocalistas Almir Guineto, ex director de
batería de la escola de Samba Unidos do Salgueiro. Fundo
de Quintal interpretó una Samba diferente, mezclada con otros
ritmos africanos no tan difundidos y con un sonido nuevo, con la introducción de
instrumentos como el banjo con mástil de cavaquinho (creado por Almir
Guineto) y el repique de mano (creado por el músico Ubirany)
y la sustitución del surdo por tantã (creado por el músico y compositor Sereno).
A Beth le gustó la presentación de Samba en Cacique de Ramos y comenzó
a grabar composiciones de estos nuevos sambistas, ayudando a revelar nombres
como Zeca
Pagodinho, Jorge Aragão, Almir Guineto y Fundo de Quintal. Con
buena aceptación pública de las Pagodes grabadas por Beth
Carvalho, otras comenzaron a grabarse a principios de los años 1980, y
los bailarines de Samba revelados por la cantante comenzaron a ser difundidos y
transmitidos en estaciones de radio y canales de televisión por la industria
musical.
De esta forma se consolidó un nuevo estilo musical dentro de la Samba.
A finales de esa década nacería una nueva faceta dentro de la Pagoda,
que se popularizaría en la década siguiente. Estimulada por las necesidades
comerciales, la industria fonográfica avaló la grabación de Pagodes
con un aire más “dulce”, tanto en las letras, pero principalmente en la
armonía, la cual fue muy modificada por los constantes acordes sintetizados de
los teclados electrónicos, que resultan en un sonido con una mirada diferente,
mucho más Pop. Este fue el caso del éxito “Parabéns pra você”, del
grupo Fundo de Quintal. Al mismo tiempo, ciertos grupos,
principalmente de los suburbios de São Paulo, comenzaron a adaptar coreografías
y vestuario de grupos vocales estadounidenses (como The Temptations, The
Stylistics, Take 6) bajo una base rítmica cercana a la Pagode tal como se
conocía hasta entonces, pero completamente diferente al trabajo de cantantes
como Bezerra
da Silva y Zeca Pagodinho. Las discográficas invirtieron mucho en esta
vertiente más “dulce” del Pagode inyectado con letras
románticas e instrumentos electrónicos (hasta entonces prácticamente ajenos a
la Samba),
pues vieron en este nuevo Pagode un gran potencial para ser
tocado en grandes conciertos y competir con los artistas más populares de ese momento.
De estas modificaciones nació la Pagode romántica, un estilo muy
alejado de sus características originales, aunque llegó a ser tan popular o más
popular que la Pagode original.
Fuentes: