Durante los
primeros meses que siguieron al golpe militar de marzo del 76, pareció que los
vínculos entre Argentina y Chile iban a transitar por un camino más cercano a
la concordia que al conflicto, debido esencialmente a las coincidencias
ideológicas entre los gobiernos de los generales Videla y Pinochet. Estas
coincidencias ideológicas ayudaron a fortalecer lazos de cooperación en la
lucha antisubversiva y en la denominada "Operación Cóndor" ya también
se trasladó al ámbito económico ya que se firmaron
convenios para
el uso pacífico de la energía nuclear, la adquisición de bienes de capital y
ganado reproductor y el suministro de gas natural. No obstante, la estrecha
cooperación entre las fuerzas de seguridad en la lucha antisubversiva no fue
obstáculo para que sectores "duros" de uno y otro lado de la
cordillera dieran rienda suelta a sus deseos territorialistas. A decir verdad,
el conflicto del Beagle fue un tema que el régimen militar heredó de la época
peronista, en la que no se produjeron avances significativos.
A su vez los
peronistas habían recibido esta cuestión del ciclo militar de la llamada
"Revolución Argentina". Precisamente, bajo el último gobierno de este
ciclo tuvo lugar el acuerdo argentino-chileno para someter sus diferencias del
Beagle al arbitraje de la Corona Británica. El laudo arbitral otorgaba a Chile
las islas Lennox, Nueva y Picton ubicadas en el canal de Beagle.
Mientras el
gobierno de Pinochet se apresuró a reconocer el fallo, no ocurrió lo mismo del
lado argentino. La resolución arbitral colocó al gobierno de Videla frente a
tres alternativas: Una, impulsada por los sectores "duros" del
Ejército y la Marina, era de rechazo total; la otra, de índole intermedia,
postulaba la aceptación de la soberanía chilena en las tres islas, pero
rechazando la proyección Atlántica a Chile; y una tercera, impulsada por
algunos sectores de la Cancillería y de la Fuerza Aérea, proponía la aceptación
del fallo arbitral.
El gobierno
chileno instaló puestos de vigilancia y señales en las islas Freycinet, Nueva y
Deceit, y colocó al frente de los mismos a oficiales de la Armada. Por su parte
el gobierno argentino ordenó el balizamiento de las islas Barnevelt, al sur del
Beagle, en junio, la movilización de parte de la flota naval hacia el sur en
septiembre y el envío de tropas al sur con la intensificación de actividades
navales y aéreas en la región en disputa en el mes de diciembre.
En este
contexto de fuertes presiones por parte de los sectores "duros" de
ambos lados de la cordillera, los esfuerzos por mantener abiertas las vías de
negociación tropezaron con serias dificultades. Pinochet y Videla se reunieron
en la base aérea de El Plumerillo, Mendoza el 19 de enero de 1978 y ambos
mandatarios expresaron su deseo de no ir a la guerra y de reunirse nuevamente.
Luego se
integró una comisión, la COMIX que logró su objetivo de crear un clima de
distensión necesario para que en una segunda instancia de negociación se
alcanzaran acuerdos entre las dos partes. Detuvo las actividades militares y
aseguró la libertad de navegación en el área en disputa. Tras 45 días de
gestión de la COMIX se creó una nueva comisión que debía resolver, en el plazo
de seis meses, los problemas de fondo de delimitación definitiva de las
jurisdicciones argentina y chilena en el sector austral. Pero la COMIXŽ llegó a
noviembre del 78 sin alcanzar ningún acuerdo. La instancia de negociación
bilateral entró en un círculo vicioso que acercó peligrosamente a ambas partes
a la posibilidad de la guerra. En junio del 78 efectivos del ejército y la
Fuerza Aérea argentina efectuaron maniobras de simulación de guerra en el sur.
En septiembre y octubre, se llevaron a cabo prácticas de ataque aéreos y
apagones de luz en distintas ciudades. Así mismo las embajadas argentinas en el
exterior denunciaron incursiones aéreas y movilización terrestre de los
efectivos de las Fuerzas Armadas chilenas entre julio y octubre del 78. Las
autoridades argentinas adoptaron medidas de presión como el cierre de pasos de
fronteras con el objetivo de impedir el tráfico chileno hacia Brasil y la
imposición de tarifas a "bienes de seguridad" argentinos que se
dirigían a Chile, que incluían productos como zapatos y mermeladas. En esta
nueva etapa, que abarcó los agitados meses de noviembre y diciembre del 78, los
gobiernos de Argentina y Chile acordaron que el mediador fuera el Papa, lo que
finalmente evitó la guerra. A comienzos de 1979 se firmó el "Tratado de
Montevideo" por el cual el tema quedó temporalmente archivado. En 1984 el
presidente Alfonsín y el canciller Caputo libraron la batalla final contra los
nacionalistas encabezados por el senador Vicente Saá. Hubo un plebiscito y la mayoría
de los argentinos votó por la sensatez.
El director
chileno Alex Bowen filmo una historia de ficción entre dos trincheras,
enmarcada en el conflicto pre-bélico del Beagle de 1978 entre Argentina y
Chile. Allí hubo soldados que llegaron a estar seis meses en las trincheras.
Para llegar a filmar entrevistó a centenares de chilenos y argentinos que vivieron
en el frente de un conflicto que nunca llegó. La historia surge de esas
conversaciones. Ese es el motivo por el cual soldados, realizadores y actores
filmaron en medio de un campo minado de verdad. El regimiento donde se filmó
esta ubicado a metros de la Estancia San Gregorio, un pueblo abandonado a 100
km de Punta Arenas. Los carteles de "Atención, campo minado" hacen
infranqueable el paso por el campo. Ahí es donde la coproducción trabajó
arduamente para contar la historia de "confraternización con el
enemigo" que implicaría el fusilamiento para cualquiera de los dos
ejércitos. La película cuenta con el apoyo del ejército chileno y los soldados
han colaborado con el rodaje: un soldado hizo de sonidista, otro de
vestuarista, y el resto de la tropa se dedicó a tareas de producción. La
historia que el director chileno quiere contar es la de dos trincheras perdidas
en el medio de una posible guerra absurda que no existió pero que llevó
soldados a la línea de frontera a combatir. En la ficción todo comienza cuando
una patrulla chilena irrumpe en la Patagonia sin demasiada seguridad en cuanto
a su ubicación. Hace frío y la tensión aumenta agravada por la falta de una
adecuada comunicación. Al tiempo, un pelotón argentino se coloca frente a ellos
y se atrinchera, sabiendo tan poco de la situación general como sus ocasionales
adversarios.
El grupo de combatientes chilenos sale a defender la frontera con
el ánimo henchido de odio antiargentino y en la convivencia forzosa -a uno y a
otro lado de la frontera artificial- empiezan a diluirse los prejuicios. En la
trinchera chilena los soldados dan puñetazos en la tierra y blasfeman contra
los argentinos por la tenencia de una oveja. Algo -no demasiado- habrá de
suceder para romper la monotonía y generar, sino el principio de una bella
amistad, por lo menos un cierto grado de tolerancia y solidaridad mutuas. Los
dos bandos de cinco soldados que empezaron queriendo matarse, en confianza,
terminan compartiendo un asado de cordero y un picadito. En el campo de combate
ficcionado están Manuel Dedovich, es un general directo y compasivo, que tiene
la tristeza del hombre lúcido que sabe que no podrá detener la masacre. Lo
secunda Jorge Román, que es un militar capaz de cualquier cosa. Los objetivos
de "Mi mejor enemigo" son muy nobles y políticamente correctos, pero
se extraña una dosis mayor de riesgo artístico, de sentimiento, y especialmente
de momentos que superen la indudable corrección del conjunto y que hubieran
servido para recordar cuán cerca estuvimos de una catástrofe que hubiera sido
imperdonable. Esta película muestra que todo carece de sentido cuando un
soldado se encuentra solo, con un arma, frente a alguien que se le parece
demasiado como para querer eliminarlo.
Nació en Cayenne,
en la Guyana Francesa, el 18 de julio de 1917. Cuando tenía 7 años sus padres
se trasladaron a París. De adolescente descubrió el jazz de Duke Ellington y
Louis Armstrong. Apasionado por esta música estudió trompeta, violín y
guitarra. En los años 30 hizo sus primeras armas presentándose en las terrazas
de los cafés. En 1933 consiguió sus primeros contratos en los cabarés
parisinos. A los 20 años ingresó en el ejército y luego de la guerra formó su
propia orquesta. En el 47 editó su primer disco "Maladie d'amour". En
el 49 obtuvo el premio de "L 'Académie Charles Cros" por su disco. Se
presentó luego en la ABC, el templo del music-hall de París, en donde conoció a
Jacqueline, su esposa y agente. Ese mismo año apareció "Un chanson
douce", que se convirtió en un clásico de su repertorio.Junto a su amigo Boris Vrian compuso más de
400 canciones, entre ellas, "Le blues du dentiste" o "Faut
Rigoler". En 1964 creó su propio sello "Rigolo" con el que
produjo numerosos éxitos. En 1973 el cantante animaba cada domingo la edición
televisiva "Dimanche Salvador" y editó numerosos discos exitosos. En
1988 fue nombrado "Caballero de la Legión de Honor" por Francois
Miterrand. Después de varios años de silencio decidió grabar un nuevo disco que
fue muy bien aceptado por la crítica y el público. Por su disco "Chambre
avec vu" recibió el "Premio al intérprete masculino del año" en
la entrega de los "Victories de la Musique" en 2001. En 2005 Henri
Salvador editó un CD doble que contiene la integridad de su recital en el
"Palais des Congrés" de París en febrero del 2004.
II fait dimanche
Era
domingo cuando sonreías
Y
por las persianas parisinas
Un
rayo de sol enrojecía
Las
paredes de nuestro nido acogedor
Era
domingo al borde del agua
Vino
blanco helado debajo de las glicinas
Cuando
en tu boca volvían las palabras
Esas
primeras palabras que se adivinan
Era
domingo y todos los días
Cada
vez que sonreís
Es
la venganza del amor
Sobre
el tiempo que pasa sin ruido
Era
domingo en Marrakech
En
las sombras de una de sus callejuelas
Cuando
volaba sobre tus labios frescos
Era
domingo a la orilla del mar
Cuando
contaba tus besos en granos
Como
si fuera el más grande de los desiertos
Que
no llenarían mi reloj de arena
Era
domingo y todos los días
Cada
vez que sonreís
Es
la venganza del amor
Sobre
el tiempo que pasa sin ruido
"Attaque
77" arrancó como un grupo de amigos: los hermanos Ciro y Federico Pertusi;
los primos Mariano y Danio Martínez y Claudio Leiva, que se juntaban a tocar
sus canciones favoritas con un estilo Punk, casi todas ellas de Los Ramones y
composiciones propias con letras de contenido social. Con el tiempo fueron
incorporando otras influencias: "Sex Pistols", "The Clash",
"Dammed", el Punk inglés del 77. "Cabeza de navaja" fue la
esencia de lo que al poco tiempo se conoció como "Attaque 77", nombre
inspirado en la revolución Punk producida en ese año. A mediados de 1987
lograron actuar en un karaoke de la zona del Abasto. Con entusiasmo y sin
vergüenza coparon el escenario y lograron mostrar su música. Luego de 8 temas
el encargado del lugar los echó alegando la minoría de edad de Federico. De vez
en cuando grababan los ensayos en cassettes convencionales para repartir entre
amigos. Por casualidad una de las copias llegó a manos de un integrante del
grupo "Descontrol" que estaba preparando una presentación en
"Cemento" y necesitaba una banda soporte. La aceptación fue inmediata
y este fue el debut oficial de la banda.
Con sus grabaciones caseras los
"Attaque 77" iban a dos disquerías estratégicas del momento, una era
"John Lennon" de Flores y la otra era "Show Rock" de
Cabildo. En 1988 siguieron presentándose en pubs hasta que juntaron el dinero
suficiente para grabar en un estudio profesional. El dueño del estudio era Luis
Landriscina y ahí se grababan jingles y grabaron temas de "Attaque
77" y de "Defensa y Justicia", sin saber que en la sala de al
lado los responsables del sello "Radio Trípoli" estaban preparando el
disco "Invasión 88", un compilado de grupos Punk locales.
"Attaque" fue invitado a grabar con ellos y así fue como quedaron
registradas las canciones "Brigada Antidisturbios" y "Sola en la
cancha". Si dudas estos fueron los temas más destacados de este grupo, por
lo que la discográfica les ofreció grabar un larga duración. Danio Martínez y
Claudio Leiva renunciaron al proyecto y se incorporó Leonardo de Cecco en
batería. Ahora como cuarteto (Mariano Martínez en guitarra, Ciro en bajo,
Leonardo en batería y Federico en voz) grabaron el álbum "Dulce
Navidad". Luego de esta primera placa se produjo el alejamiento definitivo
de Federico Pertusi y entonces Ciro pasó a ser el vocalista incorporándose
Adrián Vera como bajista. Con esta formación editaron su segundo disco,
"El cielo puede esperar" cuyos mejores temas son "Más de un
millón" y "Tiempo para estar". Aunque sin dudas el gran impulso
hacia la popularidad fue su hit "Hacelo por mí", cortina del programa
homónimo de televisión que conducía Mario Pergolini, hecho que los llevó a
firmar un gran contrato con una discográfica multinacional. La presentación
oficial fueron dos funciones con entradas agotadas en el estadio de Obras. El
disco superó el triple platino mientras el grupo realizaba una extensa gira que
los llevó de Paraguay hasta Tierra del Fuego.
En noviembre
del 91 hicieron dos presentaciones en Obras, que sirvieron para registrar el
disco en vivo "Rabioso! La pesadilla recién comienza", que
rápidamente alcanzó el disco de oro. En 1992 nació su cuarto álbum "Ángeles
caídos" que en muy poco tiempo fue disco de platino. Temas como
"América", "Cuál es el precio", "Justicia" y la
espectacular versión de "¿Por qué te vas?" de José Luis Perales
mostraban la maduración del grupo. Las letras mantienen la temática de los
problemas cotidianos: la falta de trabajo, los jubilados, la violencia. Luciano
Scaglione reemplazó a Adrián Vera. El éxito del reducido ambiente Punk continuó
con su quinto disco "Todo está al revés". Con un sonido más duro el
álbum cuenta con temas como "Flores robadas" y "Alza tu
voz". Ese año (1993) fueron teloneros de Iggy Pop en obras y participaron
de un festival en la cárcel de Olmos junto a siete grupos más grabando el disco
"Radio Olmos". "Donde las águilas se atreven" es una
especie de himno para los fans de Attaque y ese día quedó demostrado que
"Espadas y serpientes" era un himno para los presos. En 1994 su
anterior sello editó "Attaque 98-92", una recopilación con muchos
temas inéditos y versiones poco conocidas. En mayo del 95 encabezaron un
festival junto a "The Luckers" y "999" en Obras. Participaron
del álbum "Fuck you" un homenaje a Sumo, interpretando el tema
"Pinini Regaee" y hacia fin de año presentaron "Amén", su
septimo disco. En él, el grupo abandona por momentos el punk-rock para
incursionar en el regaee en "Tres pájaros negros" y "Redemption
Song" de Bob Marley. El 96 comenzó con una invitación para telonear a
Ramones en su despedida mundial en el estadio de River. En noviembre comenzaron
su primera gira internacional de su carrera, tocando en Perú, México y
terminando en Miami, en la MTV latina, donde tocaron sus mejores éxitos. De
regreso despidieron el año compartiendo dos shows con “Sex Pistols"
En mayo y julio
del 97 compartieron una gira con "El otro yo" por 23 ciudades
argentinas. A principios de agosto Attaque festejó sus primeros 10 años con dos
presentaciones en Cemento. Como invitados estuvieron "Cienfuegos", el
grupo peruano "63" y además de los ex integrantes de Attaque 77,
músicos de "El otro yo" y la actriz Edda Bustamante. Durante
septiembre la banda grabó y mezcló un nuevo disco en los "4th St.
Recording" de Santa Mónica, California. "Un día perfecto" tiene
15 temas muy variados, un cover de "Los Auténtico Decadentes" y un
tema en inglés. En octubre del 97 participaron en un show en homenaje a los
veinte años de las "Madres de Plaza de Mayo" en el estadio de Ferro
frente a 35.000 personas, junto a León Greco, Divididos, Las Pelotas, La Renga,
Los Piojos, Todos Tus Muertos y ANIMAL entre otros. Luego se trasladaron a EEUU
para grabar su noveno disco y realizar algunas actuaciones. El 5 de diciembre
presentaron en Cemento su nuevo disco "Otras canciones" que en menos
de 10 días vendió más de 23000 copias. Luego se trasladan a EEUU para grabar su
noveno disco y realizar algunas actuaciones. El 5 de diciembre presentan en
Cemento su disco "Otras canciones". El 98' es despedido con un
recital en La Reina. Arrancan el 99' grabando el primer videoclip del nuevo
disco, y el 21 de enero comienzan una gira por la costa. La demanada de nuevos
temas exigida por el público hacen que en el año 2000 saquen a la venta
"Radio Insomnio", en el 2001 "Trapos", en el 2002
"Amateur" y luego, en el 2003 su disco "Antihumano".
Allí está.
Parece mentira…
Tanto escuchar
los relatos y hacer conjeturas, dibujar mapas, marcar coordenadas, preparar
mochilas para comprobar —dentro de un instante— que todo era verdad.
El camino es
lento y pacífico. Verde. Mucho verde movedizo… Si el cielo casi no se ve.
Todo se
transforma en nebuloso, confuso. El paisaje ante mis ojos se transfigura
lentamente. Pareciera que los silfos de la vegetaci6n se hicieran presentes y
burlándose de mí, van cambiando de lugar los vegetales.
Afinan los
extremos de los árboles de la orilla que terminan en punta como los afilados
dientes de los cocodrilos, y el agua, por donde va la canoa, se vuelve
pegajosa, viscosa, como una glutinosa lengua de vaca antes de ser sumergida en
el agua hirviendo.
Cada vez se
oscurece más.
Mi corazón se
apresura. Trato de ver a los costados. Dos cataratitas segregan chorros de
agua, tan abundantes, que semejan dos grandes glándulas salivales derramando
sus ansias ante la proximidad de un bocado deseado.
De pronto,
alcanzo a ver el fondo de una garganta líquida y anillada, y antes de perderme
para siempre, alucinado de dicha por conocer la verdad, pienso:
—Soy el único
que ha podido navegar por la boca del río que ahora, flemática, se cierra y
Me
tra
ga.
Amancay
Si hay alguna
cosa que puede estar más al p... que cenicero de moto es el ¡aire acondicionado
para motos! Esté atento al lanzamiento de la bocina para aviones.
Un inventor
israelí diseñó el primer aire acondicionado para motos del mundo (probablemente
sea el último también). El físico Glen Guttman, de la compañía Entrosys,
consideró que “la idea es simple y como toda idea simple primero se te tiene
que ocurrir y después tenés que poder llevarla a cabo”.
El artilugio es
más interesante y efectivo de lo que uno en principio se imagina. El aparato
acondicionador de aire para motos es una unidad que se nutre de la energía
eléctrica de la batería del vehículo. Y aquí la parte creativa: el aire frío
ingresa a través de un tubo a un chaleco refrigerante que el motociclista
tendrá la precaución de llevar puesto.
El desarrollo
del sistema costó medio millón de dólares. "Yo todavía no lo pude
probar", dijo el inventor, "ya que mis inversores no me permiten
andar en moto. Quieren asegurarse de que permanezca saludable".
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