Guedra (Marruecos)

 

 

La Guedra es la danza de la Bendición Tuareg. En árabe Guedra es también el nombre de la olla (o caldero) que estos nómadas llevan consigo. Esta vasija se cubría con una piel de animal para hacer un tambor.

A diferencia de otras danzas de trance del Medio Oriente, no implica el exorcismo de espíritus demoníacos ni la matanza de pollos. Es puramente beneficioso y alegre. Los movimientos son simples, pero como todos los bailes de trance, se debe perder en el movimiento y sentirlo antes de que realmente pueda funcionar. Y lo que pasa con las danzas de trance es que sí funcionan, inducen estados alterados de conciencia. Los orígenes de los tuareg, como el de otras tribus bereberes, se pierden en la antigüedad. Los estudiosos han afirmado encontrar prácticas tanto cristianas como paganas en sus costumbres, aunque los tuareg de hoy son musulmanes. La Guedra utiliza cánticos musulmanes en sus canciones, pero obviamente tiene otras asociaciones. La cultura tuareg hoy en día se ha visto irrevocablemente dañada por la situación política actual, que los ha dividido en varias áreas bajo el control de diferentes gobiernos. Los tuareg son una de las muchas tribus bereberes; el “pueblo azul” es un subgrupo de los tuareg. Se llaman así porque utilizan una tela teñida mediante un proceso que consiste en machacar polvo de índigo en la tela con una piedra. Como las tribus del desierto no se bañan mucho, este polvo azul se pega a la piel. De hecho, consideran que este colorante azul tiene un efecto beneficioso y cosmético. Parece que en realidad ayuda a retener la humedad en la piel. Los tuareg no se refieren a sí mismos como “tuareg”, ya que lo consideran un término peyorativo. Se les conoce como “el Pueblo del Velo”, o “Kel Tagilmus” por la costumbre que tienen los hombres tuareg de llevar velo a partir de cierta edad, mientras que las mujeres van sin velo. Tienen fuertes influencias matriarcales en su cultura. Los hombres ocupan los puestos de cheftain y consejo, pero la jefatura es hereditaria a través de la línea femenina. La herencia es por parte de la madre y un hombre que se casa fuera de su tribu pasará a la tribu de la mujer. Un hombre puede ascender en la sociedad casándose con una mujer de mayor estatus, pero la mujer rara vez se casa por debajo de su estatus. Los hombres tuareg son reconocidos como algunos de los guerreros más feroces del desierto y algunos de los mejores comerciantes. En resumen, la posición de las mujeres tuareg en su sociedad es única. A pesar de los comentarios que se puedan escuchar sobre las bailarinas de Guedra como “prostitutas”, lo cierto es que en su cultura, se considera una ventaja adquirir experiencia en el amor: tanto hombres como mujeres tienen muchos amantes antes de casarse.

El respeto y la libertad otorgados a las mujeres tuareg son fácilmente malinterpretados por los miembros de otras tribus que imponen más restricciones a las mujeres. Cuando existe la prostitución, la sociedad tuareg la condena vehementemente. El traje tradicional femenino es fundamental para el baile. Es un haik que está formado por una pieza de material muy grande. El haik está sostenido por delante mediante dos pasadores de peroné de diseño antiguo, con una larga cadena enrollada entre los dos. El tocado tradicional está decorado con conchas de cauri, al igual que las trenzas artificiales que cuelgan del mismo. Se pueden añadir otros elementos que se adapten a los gustos de la bailarina, quien teje su cabello con los falsos para sujetar el tocado, que es un marco de alambre decorado: una pieza que rodea la parte superior de la cabeza y otra que se arquea desde la parte superior del frente hasta la parte posterior del aro inferior. Otras versiones parecen ser simplemente una masa de trenzas rodeadas en un círculo en la parte superior de la cabeza. Esto es muy práctico para el desierto, ya que deja un espacio de aire abierto sobre la cabeza. Este tocado también muestra muy bien el tipo de movimientos de cabeza que ocurren en la danza en trance. Las manos también quedan bien en este disfraz, que cubre mayoritariamente el resto del cuerpo. Los movimientos de los pies son en su mayoría planos con algunos movimientos de punta a punta, talón-talón y deslizamiento hacia un lado. Las mujeres tuareg usan henna en las uñas de las manos y los pies, y kohl (antimonio) en los ojos. En ocasiones festivas se embadurnan las mejillas y la frente con pintura preparada con una tierra blanquecina que se encuentra cerca de Agades, o con ocres rojos o amarillos. El ritmo básico de la danza pone el énfasis en el segundo tiempo. La Guedra es un ritual de 3 niveles construido en consecuencia: Aplaudiendo alternativamente un grupo a otro. El elemento rítmico también lo proporciona el tamborileo en el caldero. Cantos que se combinan para crear un muro de sonido, y la bailarina, que traduce esta energía en movimiento a través de sus manos. El movimiento básico es rápido con la mano, que envía energía desde el bailarín.

Hacer esto de diferentes maneras da diferentes significados. El baile comienza con la cabeza cubierta por el extremo de la prenda. Esto simboliza estar en la oscuridad y carecer de comprensión / conocimiento. La bailarina comienza a mover la mano y poco a poco levanta la tela sobre su tocado cuando se siente lista. La coreografía no es compleja, pero tener las intenciones y el enfoque correctos lo es todo. La Guedra puede ser interpretada por una mujer, dos mujeres o una mujer y un niño. En escenarios tradicionales, la bailarina puede comenzar saludando a los miembros de la audiencia de esta manera: con ambas manos: tomando la mano de la otra persona, tocando la frente de ambas personas 3 veces y luego presionando la mano firmemente entre ambas manos. Después, amigas o personas casadas se besarían las manos tres veces (lo haría la bailarina de Guedra a través de su velo). También se le puede dar un “collar mágico” a la bailarina, especialmente si un hombre ha solicitado el baile para alguien. La bailarina puede comenzar y terminar de pie o sentado. La danza comienza con movimientos de manos en las cuatro direcciones (norte, sur, este, oeste), luego a los elementos: cielo (arriba), tierra (abajo), viento (afuera), agua (hacia abajo). Las manecillas también representan elementos del tiempo: hacia atrás (el pasado), hacia los lados (presente) y hacia el frente (futuro). A medida que aumenta el impulso, la bailarina puede sentirse obligada a agregar movimientos de cabeza, lo que hace que las trenzas se balanceen hacia adelante y hacia atrás. Todos estos movimientos deben ser agudos y acentuados, no elegantes y delicados. En el canto Guedra, los cantantes deben esforzarse por lograr un sonido continuo entre las dos partes; esto ayuda la bailarina a alcanzar un estado de trance. El ritmo real permanece constante y las palmas no se aceleran. El cantante principal debe estar en contacto con la bailarina para cambiar los cantos en el momento adecuado. Todo el grupo debe trabajar como uno solo para que esto realmente funcione.

 

 

Fuentes:

 

• Bdancer.com