Habanera (Cuba)

La Habanera es un género originado en Cuba en la primera mitad del Siglo XIX. La primera Habanera documentada es “El Amor en el Baile”, de autor anónimo y publicada en el periódico literario “La Prensa”, en La Habana, el 23 de noviembre de 1842. El término Habanera se lo relaciona con la capital de Cuba. La verdadera historia cubana es la de sus intricadas transculturaciones. Desde que Cristóbal Colón llegara a la isla en 1492, han sido varias las culturas que se han ido mezclando hasta hoy. Aborígenes de Cubanacán (nombre aborigen de Cuba); españoles conquistadores y negros africanos de distintas etnias, con distintos idiomas, han hecho que la cultura, el arte, y también la música cubana, fueran formándose con elementos de todos estos pueblos. Aún así, el Renacimiento español fue el que predominó: negros libertos acabaron teniendo oficios de músicos al estilo de las orquestas europeas de la época. A partir del Siglo XVIII en España se conocieron géneros musicales llegados de América. La Contradanza, o Danza Criolla, era la “verdadera especialidad cubana”. Se comenzó a desarrollar en gran manera a partir del Siglo XIX, y presentaba elementos del Tango Congo, de origen bantú, mezclado con factores melódicos de procedencia hispánica. Muchas Contradanzas se fueron ralentizando y fueron perdiendo elementos que le eran propios, adquiriendo otros que suenan ya a lo que hoy conocemos como Habanera. Los continuos viajes de marineros y comerciantes hicieron que la Habanera fuese el primer género cubano en tener resonancia internacional.

Ya a mediados del Siglo XIX, fuentes de la época aseguraban que la Contradanza cubana se bailaba mucho en Madrid, donde se la distinguía con el nombre de Habanera. Ahora bien, la Habanera que hoy conocemos es fruto, sobre todo, de autores no cubanos, que fueron los que desarrollaron este estilo musical, en especial el vasco Sebastián Iradier, autor de la famosa “La Paloma”, considerada por algunos como la primera Habanera, ya que “El Amor en el Baile” es de autor anónimo y sólo se la consideraba como una transición. La danza Habanera es fundamentalmente un canto romántico: de amores y desamores, pero la contemporánea Guerra de la Independencia (a finales del Siglo XIX) le dio un carácter patriótico, reivindicativo por ambos lados: los marineros que desde la taberna cantaban llenos de añoranza por la tierra cubana y de muchos amores dejados allí. En España, se hizo muy popular la Habanera, y desde allí se extendió. En Europa se la emparentó pronto con la música culta y con la alta aristocracia. Los compositores de la época, buscando nuevas ideas, encontraron en este ritmo una fuente de inspiración. De todos, la más conocida es Georges Bizet en la ópera cómica "Carmen", "L'Amour est un Oiseau Rebelle". Otras piezas famosas son “Habanera para Piano”, de Emmanuel Chabrier; “La Puerta del Vino”, de  o “La Soiré dans Granada”, de Claude Debussy; y “La Habanera Para Dos Pianos”, de Maurice Ravel. En España sigue siendo un género obligado para cualquier formación coral, existiendo agrupaciones dedicadas con exclusividad al género.