Misteri d’Elx (España)

 

El Misteri d’Elx (Misterio de Elche) es un tesoro cultural del pueblo de Elche y una de las joyas más preciadas del patrimonio cultural valenciano. Se trata de un drama sacro lírico religioso que recrea la Dormición, Asunción y Coronación de la Virgen María. Dividida en dos actos o jornadas, la obra se escenifica cada 14 y 15 de agosto en el interior de la basílica de Santa María, en la ciudad de Elche, Alicante (España). Investigaciones recientes sitúan el origen de dicha obra en torno a la segunda mitad del siglo XV, contradiciendo así las tradiciones locales sobre su nacimiento. Una de ellas vincula su creación con la conquista del Elche musulmán por parte del rey Jaime I, en 1265, mientras que otra versión legendaria otorga al Misterio un origen milagroso, que lo relaciona con la aparición o “venida” de la imagen de la virgen ilicitana el 29 de diciembre de 1370, dentro de un arca de madera en la cercana localidad costera de Santa Pola. El primer registro escrito data del siglo XVII, aunque el manuscrito original se perdió, se conserva una copia, por lo que no es fácil saber la fecha exacta a la que perteneció. En la actualidad, la copia más antigua que tiene el ayuntamiento es de 1709, era una copia de la Consueta para los Mestres de la Capella. La Consueta era el nombre que se le daba a un cuaderno de apuntes, en el cual se anotaba el rito a seguir en cualquier celebración. El Misteri se trata de la única obra en su género que ha sido representada sin interrupción hasta la actualidad, superando incluso al impedimento que supuso la prohibición de representar obras teatrales en el interior de las iglesias por parte del Concilio de Trento. Fue el Papa Urbano VII quien, en 1632, concedió, al pueblo de Elche, a través de un rescripto pontificio, el permiso para continuar con dicha representación contra el intento de prohibición del obispo de Orihuela.

Todos y cada uno de los personajes del Misteri son representados por varones, tratando de respetar así el origen litúrgico medieval del mismo, que vetaba expresamente la aparición de mujeres en este tipo de representaciones. El día 14 de agosto se pone en escena la primera parte, denominada Vespra, mientas que la segunda parte, o Festa, es el día 15. Además, los días 11, 12 y 13 de agosto se realizan los ensayos generales, en los que se escenifican ambos actos seguidos. El texto del Misteri, a excepción de algunos versos en latín, está escrito en lemosín, o lemosí, denominación que recibió en la Edad Moderna el valenciano antiguo. La música es una amalgama de estilos de diferentes épocas que incluyen motivos del Medioevo, del             Barroco y del Renacimiento. Hay constancia documental de la existencia de una importante capilla de instrumentistas y cantores de la iglesia de Santa María de Elche, que alcanzó su máximo esplendor en el siglo XVIII. Entre tales músicos, cuya presencia se asentó en las consuetas con el genérico término de “ministriles”, sin aportar más datos ni partituras, se hallaban tañedores de chirimías (especie de flautas), corneta, flauta, oboe, sacabuche (antepasado del trombón), trompa, violín, arpa, etc., así como cantores profesionales, que en ocasiones eran contratados en otras ciudades. Esta capilla musical profesional desapareció en 1835 y con el fin de asegurar la continuidad de la representación del Misteri, cantores aficionados de la población, la tomaron a su cargo. En la actualidad son los miembros de la Capilla del Misterio de Elche quienes interpretan el drama asuncionista. Y, aunque muy contadas excepciones, ninguno de ellos es profesional del canto. Sin embargo, la conjunción de voces alcanzadas y el buen hacer de los cantores, queda claro en las extraordinarias escenificaciones anuales.