Danza del Pochó (México)

 


Desde mucho tiempo atrás, tanto que sus orígenes se han olvidado, los habitantes de Tenosique, cabecera del municipio tabasqueño con el mismo nombre, realizan año con año una peculiar danza como parte de las celebraciones del carnaval. Se le llama Pochó, nombre que aparece en el Diccionario maya Cordemex como una palabra registrada en la primera mitad del siglo XIX por Juan Pío Pérez, con la siguiente definición: “un baile vedado, mitotada de indios con sus tunkules”.

Así, se puede suponer que la danza es de origen prehispánico pero que sin duda fue reelaborada y readaptada en tiempos coloniales y especialmente, al menos en el caso de Tenosique, después del descubrimiento de la zona arqueológica de Palenque, en 1784.

A orillas del río Usumacinta, la flauta de carrizo y el tambor anuncian una batalla: los mayas se preparan para levantarse contra un dios malvado. La Danza del Pochó, una tradición de origen prehispánico, recorre las calles de la ciudad entre flores, máscaras, sombreros y hojas secas.

Cada domingo, desde el comienzo de la celebración, los residentes de este municipio, ubicado cerca del Petén en Guatemala, se reúnen para ejecutar la danza. En el martes de carnaval, lo hacen una vez más para la última representación cargada de rasgos prehispánico, que ilustra la eterna lucha entre el bien y el mal. En el evento final, ellos simbólicamente queman al dios Pochó.

Desde hace cientos de años, esta tradición ha unido a todo un pueblo. En el siglo XIX, ya existían registros de la representación de este baile, y desde entonces, la plaza, las calles y los patios de las casas han sido el escenario propicio para su preservación. La danza, con características de los pueblos mayas, ha sido reelaborada y readaptada desde tiempos coloniales. Roger Suárez Vela, conocido como el Guardián de la Tradición, reconoce que la Danza del Pochó ha experimentado cambios y se ha adaptado a los tiempos, pero aún mantiene su originalidad y misticismo.

Además de dos músicos (un tamborilero y un pitero) y un “capitán” vestido de civil, en la danza participan varios actores que interpretan a tres personajes principales (ante numerosos espectadores): el cojó, la pochovera y el tigre. El cojó, personaje masculino y único enmascarado, es en la actualidad el más numeroso y el más llamativo por su vestuario. Éste se compone de elementos vegetales que le confieren un aspecto semejante al de una planta con movimiento o un hombre de madera.

Consta de hojas secas de plátano enrolladas a manera de polainas en los tobillos, las cuales, al caminar, funcionan como una gran sonaja que produce un sonido similar al de los tenábaris (sonajas hechas con capullos de mariposas) y “codos de fraile” (semillas de árbol Thevetia peruviana) utilizados en danzas de venado, pascolas o concheros. Lleva una túnica, hecha con un saco o costal de henequén, que le cubre el torso y la cadera. Debajo de esta especie de túnica, la ropa es la tradicional: pantalón y camisa de manga larga, preferentemente.

Grandes hojas atadas a la cintura, del llamado árbol del pan o castaña (Arstocarpus sp.), funcionan como sobrefalda verde encima del saco de henequén.

En primer término, la cabeza y el rostro se cubren con un lienzo o tela grande que puede llegar a cubrir a manera de capa los hombros, la espalda y aun la cadera. Se sujeta con dos paliacates, uno amarrado a la frente y el otro cubriendo la boca para cambiar la voz. Después se coloca en la cara una máscara de madera que puede ir pintada, según la moda, con diversos colores y temas. Sobre la cabeza va un sombrero adornado con flores de diversos colores y hojas largas y lanceoladas que semejan plumas.

Un elemento inseparable del cojó es su larga sonaja de bastón llamada chikish, semejante a las denominadas chicahuaztli en náhuatl, las cuales estaban asociadas a ceremonias de petición de lluvias. Estos personajes suelen llevar recipientes con agua, talco o harina, con los que frecuentemente bañan a los espectadores; pueden portar muñecas viejas (reinas del carnaval), ratones e iguanas, bacinicas, paraguas inservibles u objetos eróticos, como penes y figurillas desnudas, con las que continuamente gastan bromas. El nombre de cojó puede derivar de la palabra maya koh, que significa “carátula”, “máscara” o “el que está en lugar de otro”.

La pochovera (nombre castellanizado de pochó) es el personaje femenino; su papel en la danza es mínimo y silencioso en comparación con el cojó, que es escandaloso y bullanguero. Su número es pequeño y antiguamente sólo lo personificaban ­mujeres de edad avanzada. Su vestimenta consta de una falda larga con diseños florales y una blusa blanca, de manga corta, con encajes de colores en mangas y cuello. Sobre la espalda, a manera de una pequeña capa que le cubre los hombros, lleva un paliacate rojo atado al cuello. También porta sombrero con flores y hojas semejantes a los que llevan los cojoes. Una de estas mujeres, la llamada “capitana”, suele llevar una bandera roja, que cambia por una blanca el martes de carnaval, último día en que se realiza la danza.

El tercer personaje, con más antecedentes prehispánicos, es el jaguar, llamado tradicionalmente “tigre”. Su atuendo es bastante original en comparación con los de otras danzas contemporáneas y similar a las representaciones de personajes ataviados como jaguares que, frecuentemente, aparecen en numerosas vasijas mayas del periodo Clásico, en el Códice de Dresde y especialmente en una jamba del santuario del Templo de la Cruz en Palenque. Un pantalón corto es la única prenda que cubre la desnudez de estos personajes. El resto del cuerpo lo llevan cubierto por una capa de pintura crema o amarilla, hecha con arcilla. El efecto de las manchas características del jaguar se logra mediante la impresión de círculos con un carrizo o el pico de una botella untado de carbón o pintura negra. Sobre la espalda y atada a la cabeza y a la cintura lleva la piel de este felino, cuando la hay disponible. Cuando no es así, lo más frecuente en la actualidad, se sustituye por una piel de venado o por telas sintéticas con estampados que simulan la piel de cualquier felino.

Un elemento característico de este personaje son las flores que cuelgan de su frente, de manera similar a las que porta la deidad maya conocida como Jaguar del Lirio Acuático en la iconografía maya. Completa el atuendo un silbato atado también al mismo hilo que sujeta las flores.

La danza es matutina: se lleva a cabo entre las 9 de la mañana y las 3 de la tarde, aproximadamente. La coreografía es circular y en ella las pochoveras usan un paso parecido al de las Mazurcas. Pasado un cierto tiempo que marca el tambor, los cojoes tienden una cuerda que los tigres se turnan para saltar, después de esto, los tigres quedan sueltos y “capturan” uno por uno a los cojoes que bordean el círculo, mientras las pochoveras continúan rodeándolos con sus pasos. Cuando ya han llenado la parte central del círculo el redoble del tambor marca su disolución, y todos los cojoes son libres de nuevo para bailar en el círculo exterior. En los lugares donde hay árboles o azoteas donde se pueda trepar con relativa seguridad se lleva a cabo una variante en la que los tigres trepan y son luego capturados por los cojoes. Este ciclo se repite una y otra vez por las calles del pueblo donde va pasando la caja, y en su camino van integrándose más y más danzantes, hasta llegar a la plaza central donde se concentran en gran número para la danza final. En años recientes, retomando una parte de la tradición olvidada, se hace un baile final en el pequeño parque a la orilla del malecón, que generalmente coincide con la puesta de sol sobre el majestuoso río Usumacinta.

El documento más antiguo que se conoce sobre la Danza del Pochó es una descripción de Manuel Bartlett Bautista publicada en 1926, y esto es llamativo, porque durante los siglos XVIII y XIX pasaron por la zona una gran cantidad de exploradores, arqueólogos, antropólogos y otros interesados en la cultura maya, sin embargo, no hay una sola mención sobre esta danza.

 

 

Fuentes:

 

• Nubedemonte.com

• Arqueologiamexicana.mx

 

 





































 

 















 


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