Demasiadas Noches 207 (FM Inolvidable)

 














Este martes se anunciaba la entrada de la banda en el cartel y este mismo martes se anunciaba su salida. La banda de rock Kiss ha quedado finalmente fuera del cartel del concierto de tributo a Michael Jackson en Gran Bretaña después de que se revelara que el líder del grupo, Gene Simmons, dijera que Jacko era un abusador de menores.

La decisión de bajar a Kiss del cartel se produjo después de que los admiradores de Jackson expresaran su malestar por los comentarios de Simmons. "Escuchamos a los admiradores de Michael y estamos agradecidos de haber sido alertados de estas desafortunadas declaraciones de Gene Simmons", dice en un comunicado el organizador del concierto, Chris Hunt.

 

 

 


Los días 11 y el 12 de julio de 1986, la banda del malogrado Freddie Mercury ofreció dos conciertos en el estadio de Wembley que han pasado a la historia de los grandes recitales del rock. La fecha prevista para este nuevo trabajo es el próximo 6 de septiembre. Por primera vez podrán verse ambos conciertos en una edición con imágenes restauradas y un nuevo sonido 5.1. Este nuevo material estará disponible en edición estándar con 2 DVD y también en edición deluxe limitada de 2 DVD + 2 CD. Además, como extras incluirá un documental con Brian May y Roger Taylor donde explican cómo fue la planificación de estos conciertos, así como imágenes filmadas en secreto de los ensayos de aquel tour. Esta reedición se une a las que serán lanzadas, también el 6 de septiembre, de los discos "The Works", "A Kind Of Magic", "The Miracle", "Innuendo" y "Made In Heaven", los cinco últimos discos del grupo.

 

 

 


 

 

 

 


“Luego de la disolución de Ratones Paranoicos, banda de la cual fue líder por más de 20 años, Juanse presenta su nuevo disco, Baldíos lunares, en septiembre, en todas las disquerías del país.” Así, con una gacetilla enviada por mail en la madrugada del martes y como al pasar, se informó oficialmente la separación definitiva –definitiva por ahora– del grupo de Juanse, Sarcófago, Pablo Memi y Roy, un enclave fundamental para la tradición stone argentina, que se va luego de 25 años y 25 obras editadas. La historia del cuarteto tuvo su prólogo en 1986 y su epílogo en 2009, ambos discos publicados bajo el nombre Ratones Paranoicos. Fue un cierre con reafirmaciones hacia el seno de la banda, que nació y murió en lo mismo: el rock y los discos epónimos. Para su último álbum había retornado el bajista Pablo Memi (en lugar de su reemplazante, el Zorrito Fabián Quintiero) y volvieron a trabajar con Andrew Loog Oldham como productor. Presentaron el disco en el Luna Park a mediados de 2010, en lo que fue el último gran show del grupo en solitario, y que coincidió con la reedición de su segundo y fundamental disco, Los chicos quieren rock, de 1988, cuya versión siglo XXI vino acompañada de un DVD de su show en Cemento en 1989. Por lo pronto, ese sitio web tan El mundo según Wayne (o Billy & Ted) de los Ratones Paranoicos no se había hecho eco, al cierre de esta edición, del anuncio solista de Juanse. “Mis otros discos solistas los tenía más como hobbies, hasta Energía divina (nominado para el Grammy Latino 2008 como mejor disco de rock), que generó en mí una necesidad de expresarme que no estaba alcanzando con Ratones”, explica someramente la gacetilla. “Tengo el camino bien claro por dónde ir... y logré el mecanismo de crear el arquetipo sin necesidad de intervenir con mi ex carrera con Ratones”, cierra Juanse, que aprovechó para avisar que esta colección de once nuevas canciones más un cover de Almendra es “el mejor disco” de toda su carrera.

 

 


 

In Flames, Deicide, Napalm Death, Paradise Lost, Sick Of It All, Fates Warning, Caliban, Crowbar... el aficionado medio a los sonidos contundentes conoce de sobra todas estas bandas y muchas más de las que editan la discográfica alemana Century Media y sus sellos asociados. Desde el jueves pasado, aquellos usuarios del servicio de música gratuita online Spotify que busquen los LP de estas bandas (solo los editados en los citados sellos), no los encontrará. La medida ha sido comunicada hoy a la prensa mediante una nota que no deja en buen lugar a la conocida aplicación musical sueca: "Century Media ha decidido retirar sus repertorios de Spotify en un intento de proteger los intereses de sus artistas (...). La venta física de discos está cayendo drásticamente en todos los países donde Spotify está activo. (...) Dado que los artistas necesitan vender para poder continuar creando, Spotify se ha convertido en un problema para ellos". Este servicio online de música contaba en marzo con diez millones de usuarios, de los que un millón eran de pago. "De la misma manera que todos en la compañía creen en las posibilidades de las nuevas tecnologías y los nuevos caminos de hacer llegar la música a los fans, Century Media es también de la opinión de que Spotify, tal y como funciona en este momento, no es el camino a seguir. Es un modelo de negocio que afecta dramáticamente a la remuneración que obtienen los artistas y acelera la caída del mercado, lo que puede llegar a hacer que bandas no tengan la oportunidad de grabar y editar su música de la manera debida, y en un caso más exagerado, ahoga a nuevas bandas que ya lo están pasando mal para salir adelante", agrega la nota. Un portavoz de la discográfica, por vía telefónica, pone un ejemplo del problema (advirtiendo de que las cifras son solo orientativas): "Si una banda consigue pasar de ingresar 100 a 200 euros por duplicar sus escuchas gratuitas en Spotify, dejará de ganar unos 4.000 euros por ventas, tanto en formato físico como digital". Century Media ha considerado, además, que los adelantos pactados con Spotify (de los que no da detalle), no compensan ese dinero que se deja de ingresar al caer el volumen de ventas. Estas fuentes aseguran que las bandas afectadas fueron informadas antes de que se adoptara la medida y que "en general, la respuesta está siendo buena". En cualquier caso desde Century Media afirman tener la potestad para adoptar esta medida de manera unilateral.

 

 

 

 

 

 


 



 

 

 

 

 

 

Pasaron 15 años desde que Tom Hanks debutó como director con Eso que tú haces, una entretenida comedia sobre el mundo de la música de los años ´60. Después de mucho tiempo el actor decidió volver a la dirección con un proyecto que escribió junto a Nia Vardalos, la protagonista de Mi gran casamiento griego. Larry Crowne es supuestamente una comedia romántica que tiene la particularidad que no es cómica y mucho menos romántica. El film no hace otra cosa que demostrar lo alejado que se encuentran Hanks y Vardalos de la gente común de la clase trabajadora de Estados Unidos, cuyas problemáticas intentaron retratar en esta historia. Así al menos lo aseveró el director en varias entrevistas. Larry Crowne es un sujeto de cuarenta y pico que es despedido de su trabajo, pese a ser un buen empleado, por no tener una educación universitaria. Al quedarse sin empleo el personaje decide emprender un nuevo rumbo en su vida al retomar sus estudios y hacer un montón de estupideces como unirse a una banda de motoqueros que andan en scooter. Una comedia protagonizada por dos figuras importantes de Hollywood como Hanks y Julia Roberts no fracasa en los cines por casualidad, más allá que la pareja que hacen los dos no tenga demasiada química. Larry Crowne es un film insípido y aburrido, donde al margen de las cosas que se le puede objetar al guión, la gran falla de este film pasa por la dirección.
Tom pierde demasiado tiempo en su narración durante gran parte de la película con situaciones intrascendentes que no le aportan nada a su personaje y tampoco avanza en el conflicto. Recién en los últimos 20 minutos la trama se pone un poco más interesante. Hace mucho tiempo que no se veía una actuación tan desganada como la que presentó Julia Roberts en esta película. Parecería que participó en este film simplemente para saldar un favor con Hanks. Uno recuerda las memorables comedias románticas que Tom hizo con Meg Ryan, por lejos su mejor pareja en el cine. Larry Crowne es otra prueba de lo difícil que es encontrar una gran propuesta de este género por estos días.

Título original: Larry Crowne / Año: 2011 / Duración: 98 min. / País: EEUU / Dirección: Tom Hanks / Guion: Tom Hanks, Nia Vardalos / Música: James Newton Howard / Fotografía: Philippe Rousselot / Intérpretes: Tom Hanks, Julia Roberts, Bryan Cranston, Nia Vardalos, Pam Grier, Jon Seda, Cedric the Entertainer, Tom Budge, Holmes Osborne, Rami Malek, Bob Stephenson, Rita Wilson, Wilmer Valderrama.

 

 

 


 

 

 

 


 

 

 


 

 

 

El grupo se formó a principios de los 90 en torno a Laurent Hess, hoy cantante de Charge 69. Luego se incorporaron Nico, Ralph, Jérome, Piero, Pilles así como dos coristas, Cathy y Khadija. Tienen un estilo particular, mezclando un buen humor en sus letras con su Ska revival. Skaferlatine eran teloneros de Satellites y VRP, luego conocieron un verdadero éxito en el Este de Francia y, en particular, en Metz, donde comparte frecuentemente cartel con PKRK. Editaron su primer álbum, En piste, en 1993. Skaferlatine es uno de los primeros grupos de ska franceses en ser reconocido en varios países europeos. La formación cambió en varias ocasiones antes de la aparición del segundo álbum, En Chantier, siempre autoproducido y en 1998 "Basta, Basta".

 

 

 


 

 

 

 


 

Metido en mi cama en el cuarto oscuro

Cuando algunos cuentan ovejas

Pienso en cosas ilusorias

Que mañana se olvidan

Son borrosas en mi razón

Tengo pensamientos malsanos

No me gustan los sueños

Que sólo prometen el desierto

Tengo el alma corrupta

En la cama es el oasis

Cuando me pongo en escena

En fiestas perversas

En términos psiquiátricos

No tengo nada de inhumano

Incluso los políticos lo tienen

Parece ser una característica común

Pero me atreveré a decirle

Cuando vea a la carnicera

Qué esta noche la he visto

Sometida como el ángel en su vestido de carne

Era necesario que hable

La noche, mis sueños son lujuria

Pero me tranquiliza

Parece que es totalmente normal

Si a veces me levanto con sudor

No me da miedo de algunos

Que sueñan perversiones

Es que el despertador

Suena cuando venía el mejor

Una sirena resuena, otra se ha desmayado

Grito, me desgañito, no hay nada de peor

En términos de psicoanálisis

No tengo nada de inhumano

Incluso los religiosos

Tienen esta característica común

En términos similares es anodino

Incluso los psicólogos

Tienen especias en sus jardines

Pero me atreveré a decirle

Cuando vea a la actriz

Qué esta noche la he hecho prisionera

De mil de maleficios



 


 

 

 

 

 


 

 


 

 

 

 


 

 

Just a Gigolo es una canción popular, adaptada por Irving Caesar en 1929 de la canción austríaca “Schöner Gigolo, armer Gigolo", escrita en 1928 por Leonello Casucci (música) y Julio Brammer (letras). La versión original es una visión poética del hundimiento social experimentado en Austria después de la Primera Guerra Mundial, representada por la figura de un húsar anterior que recuerda desfilar en su uniforme, mientras que ahora él tiene que ser bailarín contratado. La música ofrece una secuencia melódica simple, pero no obstante tiene una construcción armónica en la que se destaca las emociones mezcladas en las letras, añadiendo a un efecto agridulce. El éxito de la canción incitó a un editor de Tin Pan Alley a comprar las derechas y pedir una versión inglesa a Irving Caesar, autor muy popular de ese tiempo. Caesar eliminó las referencias austríacas y en la letra fijó la acción en un café de París, donde un actor local cuenta su historia triste. Así, la canción conservó su lado sentimental pero perdió su valor histórico. La canción fue registrada por muchos músicos, incluyendo Louis Armstrong, Dajos Bela y Richard Tauber (en alemán), aunque las versiones más conocidas son las de Louis Prima, de 1956, y el cover de David Lee Roth, de 1985. El film Schöner Gigolo, armer Gigolo, dirigida por David Hemmings en 1979, fue titulada así por el primer verso de la canción original, pero se la llamo “Just a Gigolo” para la distribución en EEUU. En esta película, la canción fue realizada por Marlene Dietrich.

 

 

 


 

 

 

 


 

 

 


 

 

 


 

En una de las últimas presentaciones de Steve Jobs, antes de tomarse una baja laboral, mostró en grandes rasgos cómo sería su sistema operativo estrella, de nombre Lion, llamado a unificar la gestión de programas y tareas en escritorio más sencillo. Era octubre de 2010. Para ver las primeras imágenes hubo que esperar hasta el 6 de junio, durante la conferencia de desarrolladores de Apple en San Francisco. De nuevo, Jobs hizo de maestro de ceremonias para mostrar su concepción del ordenador del futuro. Más orden, más limpieza y una sencillez de uso que irrita a los usuarios más avanzados. ¿Ha merecido la pena la espera? Según las cifras de descargas parece que sí. El 20 de julio comenzó la venta del programa. Apple puso un cartelito de R.I.P. a la caja de software de las estanterías. Lion solo se puede conseguir en Internet, más concretamente, en su tienda de aplicaciones, como en iPhone e iPad. Se entra con un perfil de usuario, se paga y comienza la descarga. En 24 horas registraron más de un millón de compras a razón de 23,99 euros cada, una cifra bastante razonable. Apple permite que un mismo usuario lo descargue e instale hasta en cinco ordenadores de su propiedad. Si se tienen varios ordenadores Mac en casa es más que suficiente. Una vez que se ha pagado por el programa, comienza la descarga. Aquí hay que armarse de paciencia. La instalación de Lion es extremadamente sencilla, pero lleva su tiempo. Alrededor de dos horas y media después, depende de la velocidad de conexión, comienza la instalación en sí. La cuenta atrás indica 35 minutos, después 33 y... se queda un buen rato marcando 33, con el contador parado. En algo más de 45 minutos el león comienza a rugir. El primer cambio, meramente visual, se da en el fondo de pantalla. Por defecto aparecerá una imagen de la galaxia de Andrómeda. Se puede cambiar al momento, pero los fieles prefieren seguir las directrices de Cupertino hasta en los guiños estéticos.

 

 


 

No nos van a dejar tranquilos ni en agosto, sobre todo teniendo en cuenta la importancia de la noticia, y es que tal y como leéis en el titular, Google se hace con la empresa americana Motorola, más concretamente, la división encargada del negocio móvil. La adquisición de la división Motorola Mobility de la histórica empresa de telecomunicaciones americana está valorada en 12.500 millones de dólares. Así podemos leerlo, de forma oficial en el blog de Google, a puño y letra de Larry Page. La compra parece tener una intención bastante clara, tal y como os informamos hace unos días, Motorola tiene potente propiedad intelectual en su haber que le permite defenderse de todos los movimientos de patentes que estamos sufriendo en el panorama de la tecnología móvil. Justamente esto era lo que nos estaba Google anunciando hace unas semanas, pagar con la misma moneda. La adquisición no implica ningún cambio en la filosofía Android como plataforma abierta, Motorola licenciará el sistema de la misma forma que lo ha estado haciendo desde que decidió formar parte de la Open Handset Alliance. Ambas empresas funcionarán como negocios separados. Aunque intenten dejar el punto anterior bastante claro, será curioso empezar a conocer las opiniones del resto de fabricantes que apuestan por Android, ahora que Motorola estará manejada por la propia Google, y lógicamente tendrá alguna ventaja sobre el resto a la hora de confeccionar dispositivos, o recibir actualizaciones del sistema.

 

 

 


 

 

 


 

Con la llegada del Samsung Galaxy R nos llamó la atención que se utilizara otra letra para la denominación de la familia de teléfonos más importante de Samsung, pero en aquel momento estábamos más interesados en el terminal que en ese hecho. Ahora nos enteramos que Samsung quiere cambiar las denominaciones de su gama de dispositivos móviles, intentándolas hacer más fáciles de recordar, en un movimiento parecido al de Qualcomm hace unos días, pero en la práctica más importante, ya que de lo que solemos hablar en el día a día es de teléfonos, no de procesadores. A pesar de que la hoja de ruta ha sido desmentida por Samsung, es lógico pensar que tienen que llegar terminales Android, bada y Windows Phone 7, y que no serán muy diferentes a lo que hemos compartido con vosotros. Los nuevos teléfonos estrenarán la nueva nomenclatura que ha ideado Samsung. Al parecer la denominación “S” se sigue manteniendo, pero como vemos en la imagen introductoria, se crean divisiones basadas en cuatro letras: Premium, con la letra“R” (Royal) Gama alta, con la letra “W” (Wonder) Gama media, con la letra “M” (Magical) Gama baja, con la letra “Y” (Young) Los teléfonos podrán contar con un número que siga a la letra antes descrita, para diferenciar dentro de cada división, por ejemplo, “Samsung Galaxy R2”. Y adicionalmente es posible que encontremos un segundo apellido: Plus: versiones con especificaciones técnicas mejoradas, pero con el mismo diseño. Ya lo hemos visto con el Samsung Galaxy S Plus. Pro: para las versiones que incluyen teclado QWERTY. LTE: servirá para identificar a los teléfonos con conectividad 4G. En los teléfonos Windows Phone 7, se mantiene el nombre y número, como en el “Omnia 7”, pero añadirán el apellido “W M o Y”, dependiendo de la gama en la que se encuentre. Con bada se seguirá la misma idea, manteniendo Wave, pero añadiendo esta vez sólo con las letras “Y” y “M”. Se hace necesario que Samsung vaya poniendo ejemplos prácticos de las nuevas denominaciones, o bien que se pare a interpretarnos mejor el gráfico.

 

 


 

John Rogers es uno de los principales investigadores en el campo de circuitos flexibles. Él y su equipo de la Universidad de Illinois acaban de desarrollar lo que denominan EES (Epidermal Electronic System), que no son otra cosa que dispositivos autónomos que pueden llevarse sobre la piel, como si de un tatuaje temporal se tratara, con distintas funciones. El invento (en la imagen) consiste en una serie de componentes electrónicos miniaturizados y montados sobre una membrana flexible. Esta membrana se pega y adapta perfectamente a la piel sin necesidad de adhesivo (gracias a las denominadas fuerzas de Van Der Waals que regulan la atracción entre moléculas). Los componentes utilizados por Rogers y su equipo permiten construir diferentes tipos de ‘tatuaje’ para diferentes usos. El primer campo de aplicación que han probado es el del diagnóstico médico. Varios sensores integrados en el dispositivo permiten tomar muestras del ritmo cardíaco y la actividad cerebral o muscular de forma ininterrumpida durante seis horas. Los datos son enviados mediante radiofrecuencia a un receptor y, al término de la prueba, basta un poco de alcohol para retirar el ‘tatuaje’. La energía para funcionar procede de una pequeña célula fotovoltáica. Este tipo de alimentación tine algunos problemas. El primero es que no proporciona electricidad suficiente para funciones más complejas, el segundo es que no funciona bien debajo de la ropa. Por todo ello, Rogers y su equipo están trabajando sobre nanosistemas de inducción y almacenamiento de energía que permitan más aplicaciones. Aparte de para el diagnóstico médico, los tatuajes electrónicos temporales podrían tener usos más lúdicos. Sus creadores han conseguido desarrollar un dispositivo que, llevado en la garganta, capta comandos de voz de la persona que lo lleva con un 90% de precisión. Aunque el sistema es bastante lento (unos tres segundos de lag) han conseguido utilizarlo para controlar un videojuego sencillo con la voz, lo que abre las puertas a futuras aplicaciones relacionadas con la telefonía o ¿por qué no? con los videojuegos.

 

 

 


 

 

 


 

 

 

 


 

 


 

 

 

El Oi! es un subgénero del Punk que nació a finales de los 70 en los barrios obreros de las principales ciudades del Reino Unido como una prometedora unidad entre Punks, skinheads y otros jóvenes de clase obrera, muchas veces llamados herberts. El Oi! fue en parte una respuesta al ver como el Punk se comercializaba. Las primeras bandas Oi! nacieron en 1977. Las más famosas eran Sham 69, Cock Sparrer y Screwdriver. Otras bandas etiquetadas como Oi! en los primeros tiempos fueron Angelic Upstarts, The 4-Skins, Blitz, The Blood y Combat 84. El Oi! fusionaba el sonido de las primeras bandas Punks como Sex Pistols, Ramones y The Clash, con influencias de las bandas Mod británicas de los 60 como Small Faces y The Who, así como los himnos del fútbol, el sonido de las bandas Pub Rock como Dr Feelgood y 101’ ers, y del Glam Rock como Slade y Sweet.
En 1980, escribiendo para la revista Sounds, el periodista Garry Bushell etiquetó al género como Oi!, tomando el término de la gutural interjección con la que el vocalista de Cockney Rejects solía introducir las canciones de su banda. Esta palabra significa algo así como “Hey” u “Hola”. La ideología del movimiento Oi! original era en general, un rudo tipo de populismo de clase obrera cuasi socialista. Las canciones trataban del desempleo, los derechos de los trabajadores, el acoso de la policía y otras autoridades, y la opresión gubernamental, aunque también tocaban temas menos políticos como la violencia callejera, el fútbol, el sexo y el alcohol.

 

 


 

 

 

Como algunos seguidores del Oi! estaban relacionados con organizaciones nacionalistas blancas como el Frente Nacional y el Movimiento Británico, algunos críticos calificaron al Oi! de racista. Sin embargo, ninguna de las bandas asociadas al género promovía el racismo en sus letras. De hecho, algunos grupos como Angelic Upstarts, The Burial y The Opressed, estaban asociados a la izquierda política y al antirracismo. Muchos grupos se manifestaron en contra del fascismo y el racismo, pero estas actitudes fueron tomadas con escepticismo, sobre todo, luego del lanzamiento del compilado Strength Thru Oi!, ya que el título era un juego de palabras con un slogan nazi que en inglés sería Strength Through Joy (la fuerza a través de la alegría). Otra ligereza cometida por los realizadores del álbum fue la portada, en la que debía aparecer un fisicoculturista cuya fotografía no apareció.

Entonces se eligió al primer skinhead que pasaba en ese momento por la calle, que resultó ser Nicholas Crane, un activista del Movimiento Británico que estaba cumpliendo una condena por violencia racial. El disco fue retirado de los negocios y redistribuido con otra carátula, pero cuando el caso llegó a los medios de comunicación, estalló el desastre. El movimiento empezó a perder fuerza pero se formó una escena Oi! en la Europa continental, Norteamérica, Asia y otros continentes. El Oi! es lo que el Punk fue en sus inicios, la música de la clase obrera, tocado por grupos de clase obrera, para jóvenes de clase obrera.

 

 

 


 

 

 


 

 

 


 

 

Un joven demandó a la Policía de Nueva Orleans porque uno de sus perros lesionó su masculinidad. Cody Melancon presentó una demanda esta semana ante la Corte del Estado de Luisiana, EE.UU. en la que alega que sus derechos civiles fueron violados cuando un agente de la ley le soltó uno de sus feroces perros, llevando a que el canino le provoque una mordedura en la entrepierna, virtualmente cortándole el pene. Melancon, de 25 años, declaró que el ataque del perro lo dejó sexualmente disfuncional, además de herirlo moralmente. Por culpa de la mordedura Cody está en tratamiento médico con píldoras y los doctores le recomendaron una reconstrucción por medio de cirugías plásticas. "No siento nada aquí abajo", señaló el muchacho. "Tengo 25 años y no puedo conseguir una erección", concluyó casi entre lágrimas. En la demanda, Melancon, pide 31 millones de dólares para gastos médicos y resarcimiento psicológico. Desde Noticias Locas le deseamos una pronta recuperación y le auguramos una carrera en el mundo del cine para adultos...

 

 

 


 

 

 

 

0 comentarios:

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...