Carimbó (Brasil)
Bailar es una de las mejores formas de expresar alegría, reunir a comunidades enteras y sentir que ahí, en ese momento, estás en contacto con el arte. En ese sentido, de norte a sur, de este a oeste de Brasil, esta cultura dancística está presente en sus diferentes formas, por ejemplo, la danza Carimbó, típica de la región norte del país.
Originario de Pará, el Carimbó nació del deseo
de los campesinos de bailar, por eso, apenas terminaban el trabajo al final del
día, bailaban al son de la música del curimbó, principal instrumento de la
danza paraense. El nombre Carimbó, o curimbó, proviene de la
lengua tupi, así, “curi” significa palo y “m'bó” significa atravesado, que en
portugués significa “palo que produce sonido”. Por eso, el instrumento curimbó,
cuyo nombre se asemeja a esta costumbre, se toca con las piernas que lo abrazan
para desarrollar la sonoridad. El tambor Curimbó es el instrumento de percusión
que se fabrica a partir de un tronco de madera al cual se le extrae el interior
para ahuecarlo y en un extremo se le añade un cuero curtido para percutir con
la mano. Proviene de la cultura afrodescendiente que trajeron los esclavos que
llegaron a la zona y luego se mezcló con las influencias indígenas y europeas. La
danza típica del noreste de Pará, así como otras categorías de danzas
brasileñas, tiene influencias indígenas, africanas y europeas. En ese sentido,
esa combinación de características hizo del Carimbó, también conocido
como Samba
de roda do Marajó o Pau e Corda, una de las principales
representaciones artísticas del pueblo de Pará. El Carimbó es una danza
cultural de la región Norte, por lo tanto, tiene su origen en el estado de Pará
durante el siglo XVII, a partir de danzas y costumbres indígenas. En este
sentido, el nombre es un homenaje al instrumento musical indígena curimbó, un
tambor artesanal muy utilizado en representaciones artísticas y religiosas. En
otras palabras, además de la danza y el ritmo, este estilo cultural también se
constituye como una identidad. De esta manera, con la combinación de varios
pueblos, es posible percibir la herencia de los negros en el vaivén de la
danza, como también está presente en el rápido tamborileo del sonido del banjo.
Por otro lado, de los europeos, la danza tiene agregados otros elementos: la
flauta, el saxofón y el clarinete. Además, es común que se formen parejas, que
se arremolinan según el sonido del Carimbó. Sin embargo, a pesar de las
diversas referencias, no es posible decir con certeza dónde nació realmente el Carimbó,
pero según algunos historiadores, el origen de la danza puede haber venido de
Marapanim. Además, en la región de Marapanim, también es donde se encuentran
grupos que buscan desarrollar la tradición de la danza típica de Pará, así como
donde se realiza todos los años el “Festival de Carimbó de Marapanim”. Mucha
gente cree que el Carimbó de Pará es una danza típica que fue traída a Brasil por
los esclavos africanos. Por lo tanto, con el paso de los años, la danza habría
incorporado aspectos de otros pueblos, por ejemplo, indígenas y europeos. En
este sentido, la costumbre de bailar habría comenzado con los agricultores y
pescadores, cada vez que terminaban de trabajar, se reunían en grupos para
bailar al ritmo del tambor curimbó. El Carimbó se puede definir como una
danza que reúne a gente alegre, que baila sin disfraces y disfruta sintiendo
sus pies descalzos sobre el piso de tierra. Por ende, tanto el vestuario como
la coreografía son sin duda los aspectos que más marcan a los Carimbós,
así como el modelo de ejecución de los instrumentos y tambores. Así, en el
baile, las mujeres se colocan flores en la cabeza, y usan diversos accesorios
alrededor del cuello y las muñecas, que hacen sonar al ritmo del tambor. Otro
aspecto es que las mujeres aún usan faldas muy coloridas y voluminosas, que dan
la sensación de mucho movimiento al bailar. Por otro lado, los hombres visten
pantalones blancos, normalmente con dobladillos enrollados, una herencia
heredada de los ancestros negros, quienes doblaban los dobladillos de sus
pantalones para realizar trabajos en los grandes ingenios.
Además, también son
los hombres quienes inician la coreografía e invitan a sus acompañantes a
unirse al baile, al son de las palmas. En este sentido, para producir el sonido
de la danza típica paraense, no pueden faltar los instrumentos musicales. En
cuanto a sus principales intérpretes se han dividido en dos corrientes, una
tradicional representada en el cantante Mestre Verequete y otra moderna que
encarna el artista Pinduca, que ha llevado el ritmo del Carimbó a todo el país y
fuera de sus fronteras. Los principales dispositivos utilizados son dos
tambores, acompañados de una flauta, el reco-reco, el banjo, el ganzá y una
pandereta. Sin embargo, con el tiempo, el Carimbó ganó mucha representación en
otras regiones de Brasil, siendo vinculado a muchas celebraciones religiosas.
Así, entre una de las celebraciones, se encuentra la fiesta que se realiza
todos los años en el municipio de Bragança, en honor a Santo Benedito. Debido a
su conexión con las festividades religiosas, el Carimbó recibió, en 2014,
el título de Patrimonio Cultural Inmaterial de Brasil. Los tipos de Carimbó
surgen como resultado de la ocupación profesional desarrollada por los
participantes, la cual puede variar según la ubicación en el estado. Son estas
actividades las que dan origen a las letras de las canciones cantadas en carimbó,
ya que contienen historias cotidianas: • carimbó praieiro, • carimbó
pastoril, • carimbó rural. El Día Municipal de Carimbó se celebra
en Pará el 26 de agosto. La fecha fue elegida en honor al nacimiento de Mestre
Verequete, artista conocido como el Rey de Carimbó.
Fuentes:
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