Qashwa de Umuto (Perú)

 

La Qashwa de Umuto es una danza que se origina en la comunidad de Umuto, distrito de Urcos, provincia de Quispicanchis, departamento de Cusco. También se la conoce como ”Umuto Cashua” y ”Qaswa de Umuto”. 

La Cachua, Cashua, Kashwa, Qashwa o Kachua, es el nombre que se le da a una danza de orígenes indígenas que es típica de las zonas de Bolivia, Ecuador y Perú. Las crónicas describen a esta danza como un baile de galanteo que se practicaba durante el incanato. Umuto es una comunidad rica en turismo gracias a su hermosa laguna y amplia variedad de paisajes. La danza Qashwa de Umuto representa al descanso de los trabajadores agrícolas después de un buen tiempo. Es una danza jovial, alegre, que se ejecuta para dar por finalizado el carnaval. En ella el galanteo y los ágiles movimientos del varón, que tratan de representar a un ave andina. Los hombres danzan con mucha fuerza, demostrando el excelente estado físico en que se encuentran, y con elegancia, que es esencial a la hora del enamoramiento o swanacuy, para luego formalizar el parentesco entre los dos. Por su parte, las jóvenes mujeres, muestran alegría, coquetería y belleza en respuesta al galanteo masculino. 

Esta danza también se caracteriza por la colorida vestimenta que usan sólo los jóvenes solteros, quienes buscan establecer pareja durante el baile. La Qashwa de Umuto capta las expresiones de la labor agrícola y el regocijo de los habitantes al saber que el año entrante no han de pasar necesidades en cuanto a la alimentación se refiere. Así mismo, al tener mercancías para vender en el mercado y tener un ingreso para su magra economía. La danza se realiza en los meses de enero y febrero, al término de los carnavales. Para el acompañamiento musical, intervienen quenas, quenachos, bombos y tarolas. El vestuario utilizado en la Qashwa de Umuto, es el que el poblador de la zona usa cotidianamente, pero en caso de festividades, como en los meses de enero, febrero y marzo, que es la época de los carnavales, los varones en especial, agregan a sus ropas elementos mimetizadores, para así identificarse con su fauna, a la vez que toda esta parafernalia cumple un papel totémico, mágico y a la vez sacralizado. Los llamados sargentos son, sin alusiones militares, simplemente por el hecho de que comandan a un grupo de jóvenes. Los sargentos, desde los primeros días del mes de enero, están vestidos con sobremangas largas, que les cubre de lado a lado en una medida real de casi tres metros de tela blanca, para querer asemejarse a las aves migratorias, las que les sirven como indicador meteorológico para pedir las lluvias tan provechosas para la agricultura, dado que pocas familias poseen terrenos con regadío propio, por eso dependen de las lluvias temporales. 

El atuendo masculino para la danza consiste en: camisa de bayeta (tela de lana); saco color verde oscuro (en algunos casos rojos); chalina ancha que cubre la parte del pecho, generalmente de color verde oscuro, que cuenta con diferentes bordados y figuras de colores llamativos; poncho multicolor de fibras de algodón; pañuelo de color blanco; sombreros de color negro, con extensiones de tela color rojo o amarillo; pantalón negro con bordados; faja; chullo de lana y ojotas. Por su parte las mujeres utilizan una blusa tradicional; primer poncho, que es delgado y de color naranja o negro; poncho de fibra de algodón con fondo rojo y figuras multicolores, además de llamativos bordados; pollera negra con bordados fucsia y rosado; faja gruesa tejida de colores y sombreros de color verde o negro y con extensiones de tela naranja y ojotas. El objetivo de esta danza es el enamoramiento de los hombres hacia las mujeres, haciendo representación de las aves de la zona.