El terror como
diversión ha sido fuente indudable de entretenimiento desde siempre. ¿Quién no
ha compartido un pasatiempo como el de narrar cuentos de miedo a la luz del
fuego? Con el paso del tiempo, hemos incorporado a nuestra cultura del ocio la
búsqueda del escalofrío por medio de historias aterradoras. Los relatos han
dado paso a las películas, y estas películas de terror han ido, sin duda,
evolucionando.
La primera película de terror de la historia fue realizada en
1910 por J. Searle Dawley, quien dirigió primera adaptación de ‘Frankenstein’.
Su enorme éxito provocó que aparecieran otros films como ‘El Golem‘. Estamos
todavía en la época del cine mudo. Entre 1930 y 1940 dominó el cine basado en
arquetipos de monstruos. Se produjeron grandes obras como ‘Drácula‘, ‘La
momia‘, ‘King Kong‘ o ‘El hombre Lobo‘. Con el cambio de década llegó el
maestro del suspense, Alfred Hitchcock, quien con ‘Psicosis’ revolucionó el
género. Ya no eran mostruos deformados quienes asustaban, sino personas con
apariencia vulgar y cotidiana, lo cual hacía del miedo una sensación mucho más
extendida e indeterminada. En los años 70 se estrena ‘Tiburón‘, pero también
‘Carrie‘ o ‘El exorcista‘. El elemento paranormal mezclado con la vida
cotidiana se muestra como una mezcla explosiva. El terror se fusiona con la
fantasía y la ciencia ficción para dar lugar a films como ‘Alien‘.
Alrededor de
los 80 aparecen ‘La noche de Halloween‘, ‘Viernes 13‘ y ‘Pesadilla en Elm
Street‘, películas dirigidas a un público masivo, que incluían el gore propio
hasta entonces de los productos de serie b. Una tendencia a mostrar escenas
violentas de manera totalmente explícita que llega hasta nuestros días. El
mejor ejemplo de ello es que en 2011, la saga de ‘Saw’ contaba con siete
películas. En la década de los 90 experimentamos una vuelta a lo insondable e
incomprensible. Innovadora fue ‘Cube‘, impactante ‘El sexto Sentido‘ y escalofriante
‘Los otros‘. Todas ellas con finales sorprendentes e inesperados. El cine
asiático explora entonces el mercado occidental con ‘The ring’, abriendo camino
para todo un subgénero. Con el cambio de milenio se reinventa de nuevo el
género y las películas de terror se acercan a casos supuestamente reales, los
cuales se muestran muchas veces como falsos documentales. Adoptan la forma de
vídeos caseros, de grabaciones de seguridad… cualquier cosa sirve para dar
realismo a la historia, la cual acostumbra a contarse en primera persona. La
precursora de todo esto es ‘El proyecto de la bruja de Blair‘, la cual dará
paso a decenas de fims que usaran esta técnica. ¿Y actualmente? ¿Cuál es la
tendencia? Pues estamos en la era de la tecnología, el 3D y los grandes efectos
digitales. ‘Expediente Warren’ o ‘Silent Hill’ cuentan con magníficos efectos
especiales y una fotografía muy cuidada que dan al espectador una lograda
sensación de inquietud. El terror es un género es constante evolución, puesto
que el miedo no es estático. Lo que ayer nos asustaba, hoy nos da risa. Pero el
miedo evoluciona, cambia de forma. Actualizarse, reinventarse o …. morir. Nunca
mejor dicho.
“Terror en la
Niebla” es una película sin alma. No nos da nada nuevo y en su lugar nos
entrega una versión descafeinada por un filtro por encima. Quizás pueda estar
bien para introducir a un niño al cine de terror sin traumatizarlo. Sus
personajes no son agradables, las actuaciones son en su mayoría son planas y el
final es un tanto extraño. Aun así no es lo peor que existe del género. Esta
película no hay por dónde tomarla. La original era un filme con atmósfera,
similar a un cuento de fogata de verano, misterioso, etc… Aquí se elimina todo
eso, sustituyendo la atmósfera con un simple filtro apagado que el director
utiliza para que parezca más oscuro. Pero la película también adopta mucho
clichés y conceptos adolescentes de la década que hacen que sea mucho más
genérica. Los actores son sin duda bastante flojos. Tom Welling es bastante
seco y tiene un par de momentos en especial donde su interpretación es bastante
pobre. Lo mismo doy para el resto del reparto. Únicamente destaco a DeRay
Devis, que realmente parece divertirse en su papel, y Selma Blair, que si bien
no me agrada su personaje sí se camufla totalmente con él. Hace una buena
actuación. Luego están los personajes y aquí es donde tengo un problema enorme.
En la original cada personaje tenía una subtrama y luego todas convergían de
golpe. El padre Malone y su diario, Kathy preparando con Sandy el aniversario,
Nick y Elizabeth descubriendo los primeros asesinatos, Stevie con su radio e
hijo… todo personaje tiene un por qué en la historia, mientras que aquí Nick y
Elizabeth están por encima de todos e incluso hacen cosas que originalmente
tenía otro. Por un lado está el chico adolescente, cuyo aprecio hacia Elizabeth
es muy voluble. Al principio le da igual, luego recuerda que la quiere y se
acuestan, luego se distancian y al final la ama… es muy complicado. Por no hablar
del final, el cual está hecho con muchas prisas y si bien se deja caer algo, no
tiene sentido todo lo relacionado con su desaparición. Como antagonista
volvemos a ver a Blake y su tripulación fantasma, los cuales han empeorado
muchísimo.
En la anterior siempre estaban ocultos, salvo un breve vistazo al
final, mataban con sus armas y tenían ese detalle tan importante que era matar
solo a seis por el centenario. Aquí lo complicaron con muertes psíquicas, a
cuantas personas quieran y más de 130 años después solo porque tocan la bolsa
maldita. Otro punto a tener en cuenta es que visualmente Blake deja mucho que
desear, por el maquillaje y CGI más que cualquier otra cosa. Tras decir esto…
¿hay algo decente? Pues tiene un par de buenas actuaciones, nos enseña un poco
más del origen de Blake… y sinceramente poco más. Quizás si no has visto la
original te enganche un poco al principio, pero no esperes mucho más.
Creado en 1995,
el grupo "París Combo" reúne a músicos provenientes de horizontes
diversos. El corazón de la banda es la cantante Benedíct Grimault, mas conocida
con el nombre artístico de Belle du Berry. Ella había participado en numerosos
grupos como "Endimanchés", "Champêtres de Jolie" e integró
el ballet para la apertura de los Juegos Olímpicos de invierno de Albertville.
Luego de esto conoció a Potzi, un guitarrista de jazz y a Jean Francois
Sauvage, baterista, a los que se le unieron el trompetista David Lewis y el contrabajista Manohisa Razanajato.
Instalados en París, el grupo se llamó "París Combo" por las pequeñas
formaciones de jazz de los años 30 llamadas combo por la abreviación del
término inglés "combinatlon Su
estilo gira en torno a la música de la entreguerra, con influencias latinas,
orientales o gitanas. En 1997 apareció su primer álbum que incluía el tema
"Moi, monâme et ma consciente". Presentaron su disco en una serie de
conciertos en el "Guinguette Pirate" un barco anclado en los muelles
parisinos. En enero del 98 fueron seleccionados para "Talents 98" como una de las
esperanzas de la canción francesa. Luego se presentaron en la Francofolies de
Montreal y en Estados Unidos, en donde debido al éxito de sus presentaciones
vendieron mas de 15000 discos, Gracias a esto editaron su disco en Australia y Alemania. En el 99 presentaron su
nuevo CD "Living Room", que sigue la línea de su primer disco y que
vendió más de 100.000 copias. En 2001 apareció "Atraction" que es
musicalmente más variado que sus precedentes. Entre enero y mayo del 2002 se
presentaron en Australia, Asia y Estados Unidos. En agosto de 2004 presentaron
su cuarto disco "Motifs" que incluye 14 canciones. En 2005 se
presentaron en diversos conciertos en Francia Estados Unidos y Alemania.
Attraction
Si
este no es el viento del cambio
Que
viene a soplar el aire de mis alas
No
es la corriente de aire que espero
Para
levantar vuelo hasta el cielo
Tengo
ganas de un vientito apremiante
Para
alcanzar la altitud
Y
saborear todo flotando
Esta
idea de plenitud
Pero
esto no se inventa
Esta
calma plana, tan plana
Sin
una nube, sin un corazón que late
Si
este no es el viento del placer
Que
viene a combatir mi ingravidez
No
dejare un mal
Apartarme
directo a un engaño
Ya
que si el amor no está en el aire
Prefiero
quedarme sobre la tierra
Y
si creo en eso como mis amigas las hormigas
En
su lejana idea del aire
Me
augura una vida de paraíso
De
labor y de carrera
Pero
nunca sola, rodeada de colegas
Y
de amistosos compañeros
Sabré
encontrar la forma
De
encontrar la felicidad
Busco
vanamente la atracción terrestre
Que
me hará tomar posición
Para
el ser extra, el ordinario
Si
el amor no está en el aire
Prefiero
quedarme sobre la tierra
Pero
si el amor no está sobre la tierra
Prefiero
volver al aire
El verdadero
nombre de Julio Sosa era Julio María Sosa Venturini. Nació el 2 de febrero de
1926 en Uruguay en la ciudad de Las Piedras, en un hogar muy pobre y humilde,
se lo conoció también como “El varón del tango”. Su padre, Luciano
Sosa, era peón de campo y su madre Ana María Venturini lavandera. Julio realizó
la escuela primaria con bastantes interrupciones ya que debía trabajar para
colaborar ya que la situación económica era muy difícil. Entre sus trabajos se
desempeñó como lustrabotas, repartidor de farmacia, vendedor de rifas, vendedor
ambulante, podador municipal de árboles, lavador de vagones, guarda y canillita
en este trabajo aprovechaba para poder conseguir revistas de música que traían
letras de tango. Durante su época de canillita solía leer con gran entusiasmo
revistas populares de música que traían letras de tangos y de alguna manera
fortalecer su pasión por el género. A los 16 años ya se presentaba como
aficionado en distintos escenarios, hasta que ganó un concurso de tango y se
inició como vocalista en la orquesta de Carlos Gilardoni y formó parte de
varias agrupaciones con la de Luis Caruso realizó sus primeras grabaciones para
el sello Sondor en 1948, fueron cinco en total, entre ellas “Sur” y “La última copa”. El 15 de junio de
1949, con 23 años, llegó a Buenos Aires, tomó un taxi para dirigirse hacia una
dirección que traía anotada, durante el viaje Julio fue contándole su historia
al chofer y que era su primera vez en Argentina, que quería probar suerte como
cantor de tangos, luego el taxista lo llevó a recorrer los distintos lugares de
la ciudad y al final del día no quiso cobrarle, cuando Julio Sosa ya era un
cantante famoso, en un programa televisivo, conto está anécdota agradeciéndole
a ese taxista que tanto lo ayudó, pero nunca se supo su identidad. En Buenos
Aires integró diferentes orquestas con las cuales se presentó en radio, bailes
y fiestas, hasta que un día el periodista y letrista Raúl Hormaza quien había
quedado fascinado con las grabaciones realizadas por Julio Sosa en Uruguay se los lo presentó
a Enrique Mario Francini y Armando Pontier quienes querían incorporar otro
cantante en su agrupación. El 1 de abril de 1949 debutó con Francini y Pontier
y a partir de ese momento consiguió afianzar su prestigio como cantante, en 1953
se incorporó a la orquesta de Francisco Rotundo y 1955 ingresó en la agrupación
de Pontier, (que se había separado de Francini). En 1958 Sosa se independizó y formó su propia
agrupación. En 1961 comenzó a grabar para el sello Columbia, el periodista Ricardo
Gaspari titular del departamento de prensa y promoción, fue quien le puso el
apodo de “El varón del Tango”. Julio Sosa se caracterizó por su carácter
extrovertido, un fuerte temperamento, registros graves y una gran capacidad
para adaptarse fácilmente al humor o al drama, desarrollando un estilo
inconfundible y la nueva imagen del cantor de tango, recio, varonil de voz
grave y extrovertido.
Además del Tango Julio Sosa era un fanático de los
autos y de la velocidad, sin
embargo no era un buen conductor de echo
había sufrido varios accidentes, pero en la madrugada del 25 de noviembre de
1964 manejando su rojo DKW Fisore chocó gravemente contra un semáforo, producto
de ese accidente varias horas después con solo 38 años de edad fallecía “El varón del tango”. Julio Sosa había grabado una semana antes de su
muerte sus últimos dos temas “Siga el corso” y “Milonga del 900”,
pero el último tango cantado fue “La Gayola” en radio Splendid,
tango que en su letra dice “juntare unos cuantos cobres, pa´ que no me falten flores cuando este dentro´ el cajón...”, sin duda julio Sosa
es una verdadera insignia en la historia del tango, uno de los más
grandes intérpretes de la música ciudadana de todos los tiempos.
Nokia predice
el fin de los reproductores MP3 y las cámaras de vídeo
Nokia, en la
voz de un ejecutivo, ha hecho publica una predicción que mucha gente ya había
comentado y que yo me niego (por cabezoneria) a admitir a pesar de que parece
evidente: los nuevos teléfonos móviles terminarán por hacer desparecer a los
reproductores de MP3 y a las cámaras de vídeo. Mucha gente afirma que las
cámaras de fotos digitales pueden seguir el mismo camino. Y es que estamos
hablando de terminales con varios GB de capacidad en su disco duro, controles
específicos para reproducción de audio, ecualizadores, altavoces integrados y
un sinfín de opciones.
Llega la
pintura tecnológica
Capas de
gelatina recogidas en lienzos que combinan intensos colores, formas
psicodélicas y texturas sintéticas. El CAC Málaga inaugura hoy la primera
exposición individual en España del artista alemán Peter Zimmermann. La muestra
recoge una veintena de pinturas, muchas de gran formato, con especial énfasis
en el uso de medios digitales.El origen del proceso para cada creación plástica
proviene de diferentes documentos gráficos que el artista manipula para
conseguir espectaculares resultados estéticos. Lo más sorprendente: sus formas
laberínticas. Zimmermann utiliza las nuevas tecnologías para generar formas que
después son materializadas en resina sintética. Ésta evoca artificialidad
debido a las diferentes texturas que logra al superponer capas de distintos
colores. Primero dispone los tonos más claros; después, los más oscuros. El
resultado es una deconstrucción de la imagen original. Su estilo podría
enmarcarse bajo las líneas del expresionismo abstracto. El creador alemán está
considerado uno de los pintores abstractos más singulares de la escena
internacional contemporánea. Zimmermann desarrolla esta visión renovadora desde
los ochenta. Su fin es dejar atrás los métodos tradicionales que suelen emplear
los artistas en sus piezas. Renovarse o morir. * Centro de Arte Contemporáneo
(CAC). C/ Alemania, s/n. Inauguración: hoy, 20 h. Mañana y el domingo, de 10 a
20 h. Gratis. Piezas que han dado la
vuelta al mundo Diversos museos de Europa y los Estados Unidos cuentan con
singulares piezas de Zimmermann entre sus colecciones de arte. Además, algunas
de las obras que se exponen desde hoy han pasado por la Feria Internacional de
Arte Contemporáneo en 2005.
De uso común, la palabra finlandesa Rautalanka
significa “alambre de hierro” (haciendo referencia a las cuerdas de la guitarra
eléctrica), y a su vez se denomina al Rock instrumental suomi en general.
Algunos entusiastas usan este término de manera más restringida para referirse
a un estilo un tanto distinto de interpretar lo que se ha desarrollado en
Finlandia a lo largo de los años. El Rautalanka típicamente es tocado por
un cuarteto que consisten en una guitarra líder, una guitarra rítmica, bajo y
batería. La música Rautalanka también puede incluir otros instrumentos y voces. El
apogeo de Rautalanka fue a principios de los años 1960, pero aún en la
actualidad cuenta con entusiastas. Las características típicas del Rautalanka
son: melodías nítidas y claras, tiempos rápidos y uso de efectos de eco, pero
poca o ninguna saturación o fuzz. Lo que distingue al Rautalanka más claramente
de otros tipos de música instrumental, es que las melodías tienden a estar en
tonos menores y melancólicos, basadas en melodías populares Rock
& Roll, Surf Rock y la música tradicional europea Schlager. El Rautalanka
comenzó a principios de la década de 1960, cuando Yleisradio tenía el monopolio
de radios en Finlandia y emitía poco el tipo de música Pop. Las estaciones de
radio extranjeras de esa época sí difundían música Pop. Esas radios se
escuchaban con entusiasmo en Finlandia, siendo la más popular Radio Luxemburgo,
en donde los jóvenes suomi descubrieron la música de guitarra, lo que los llevó
a crear sus propias bandas e intentar reproducir ese tipo de música. Grupos
como The
Shadows y The Ventures, quienes tuvieron varios éxitos importantes en las
listas de Finlandia en ese momento, sirvieron como ejemplo para las bandas de Rautalanka.
El Rautalanka
fue el primer estilo de música orientado a la juventud, e interpretado por
jóvenes, que recibió distribución masiva en Finlandia. Antes del Rautalanka,
la grabación de música y la interpretación en vivo, habían sido más o menos
monopolizadas por músicos profesionales, quienes casi siempre eran adultos. El Rautalanka
es una música muy casera. Muchos artistas del género construyen sus propias
guitarras y amplificadores personalizados. Muchas bandas de Rautalanka
usan uniformes al estilo de los años sesenta.
La edad de oro del Rautalanka duró desde
principios de 1961 hasta finales de 1963, momento en que el interés de los
jóvenes en general, se volcó al Mersey Beat, encabezado por los Beatles.
Si bien el Rock instrumental era popular en toda Europa, el término Rautalanka
se usa solo en Finlandia, Suecia (Taggtråd) y Noruega (Piggtråd).
Se refiere a la música instrumental que es demasiado melódica y limpia para ser
verdadera música Rock, pero también demasiado rítmica para ser música Folk.
El primer éxito del Rautalanka fue ”Emma”, de The Sounds, que se
convirtió en la imagen de este género musical. Mientras que el Rock
eventualmente remplazó tanto al Mersey Beat como al Rautalanka
en la cultura juvenil finlandesa, el estilo sobrevivió como música de fondo
para muchos artistas de música popular. El sello distintivo del sonido Rautalanka
es una fuerte guitarra líder (generalmente una Fender Stratocaster o un clon),
con efecto eco. La música del género es muy melódica y la sección de ritmo sólo
admite la guitarra principal. La guitarra líder es prominente y el estilo de
tocarlo es casi virtuoso. Si hay un cantante, él o ella casi siempre toca el
bajo o la guitarra rítmica. Los nombres de las bandas usualmente son en inglés
y en plural (aunque hay excepciones), esto heredado de los grupos extranjeros
como The
Shadows y The Ventures. Si bien el Rautalanka
tradicional es un género musical marginal, seguido por círculos relativamente
pequeños pero entusiastas, no dejó de existir en 1964. Ha sido la base de toda
la música juvenil finlandesa y la fuerte tradición del Heavy Metal melódico en
Finlandia, ya que tiene sus raíces en el trabajo de las guitarras Rautalanka.
Hoy en día, este género se realiza no sólo de forma instrumental, sino que
también se ha combinado con la música popular y la música de baile, no sólo por
el trabajo de Topi Sorsakoski & Agents en la década de 1980. La fuerte y
resonante guitarra eléctrica en las orquestas de baile finesas puede ser hoy
más una regla que una excepción. Algunas bandas populares de Rautalanka
incluyen The Sounds, The Strangers y Agents. También hay
varias bandas de revivall de Rautalanka, entre las que se destaca
Viikate,
que se acerca al sonido clásico desde un lado más moderno de Metal
/ Rock.
Un secuestrador que además te obliga a comer
Es muy
frecuente escuchar que un secuestrador no le haga pasar un buen momento a su
víctima. Pero de ahí a que lo obligue a comer pizza... Un hombre de Tennessee
fue acusado de secuestrar y obligar a comer pizza a su víctima. Timothy Lee
Hagewood recogió con su camioneta a Billy Watson, que estaba haciendo dedo en
la ruta interestatal 10 de Mobile. En el camino, se detuvo en el local de
cómidas rápidas "Pride Express Food Mart" y lo invitó a ingresar. Un
vez dentro del negocio, repentinamente, le pidió a Watson que se sentara en el
piso y lo obligó a comer pizza, amenazándolo con un cuchillo en el estómago. A
partir de allí, Hagewood comenzó a comportarse más extrañamente aún. Primero,
compró una bolsa de hielo con 40 dólares y rechazó el cambio. Luego, tomó una
botella de vino, la abrió rompiendo el cuello del envase contra una mesa y le
dijo "no te levantes o te corto". En ese instante, dos empleados del
lugar escaparon y llamaron a la policía. Transcurridos diez minutos desde esa
llamada, apareció la policía y el secuestrador tomó un taco de billar para
hacerles frente. Los agentes le ordenaron cuatro veces que se tire al suelo
pero, ante la negativa, lo inmovilizaron mediante una descarga eléctrica. Justo
cuando Watson estaba por pedir el postre.
0 comentarios: