Gran parte de la música del siglo XX lleva el sello inconfundible,
aunque a veces diluido, de los afroamericanos estadounidenses. La gran
influencia del Jazz y del Blues en el Rock y en todos los
sones populares de carácter más cosmopolita es innegable.
Por eso resulta
curioso encontrar un género musical, aunque local y minoritario, en el que la
comunidad afroamericana de EEUU, siguió patrones ajenos. Dicho llanamente un
sonido en que los negros copiaron a los blancos y no al revés. Y ese género es
el Cajún
de Luisiana, originario de los descendientes de los colonos franceses, adoptado
y enriquecido por los músicos del Zydeco. En 1755 los británicos
expulsaron a los acadianos, población francesa de la región de Acadia (Canadá),
por lo que gran parte de los expulsados recalaron en el territorio francés de
Luisiana. Esa región recibió también numerosos contingentes de población de
color, ya sea como mano de obra esclava de las plantaciones, o como hombres
libres procedentes de Haití. Esto generó un caldo de cultivo social que
favoreció la interculturalidad y el mestizaje musical. La palabra Zydeco
hace alusión a la música propia de los afroamericanos de Luisiana. El término Zydeco
proviene, según la tradición, de cómo los angloparlantes percibían la expresión
”les haricots” (porotos) pronunciado en francés de Luisiana, que según algunos
autores era la forma en que se denominaba despectivamente a los negros del
Delta, mientras que otros sostienen que derivaba de una canción popular de origen
francés llamada ”Les haricots sont pas salé”, que tenía un significado literal
de ”los tiempos son malos”. La música Cajún tiene muchos rasgos propios de
las zonas francesas de origen de los primeros inmigrantes, especialmente de
Poitou y Saintogne. Se trataba de la música de baile llamada popularmente “Fais
Dodo” (en el lenguaje infantil, "duérmete"). Por su parte,
los esclavos liberados en las zonas Cajún, se consideraban franceses y, aunque
con un status social más bajo, mantenían una relación bastante buena con los
Cajún blancos, frente a lo común en otras zonas del sur. La música de ambos
apenas presentaba diferencias, como se constata en el primer disco editado por
un Cajún negro, llamado Amédé Ardoin, y en sus siguientes
grabaciones.
La costumbre que tenemos los humanos de etiquetarlo todo, ha llevado a
que el término Cajún se asocie a la música blanca, y Zydeco a la de los
afroamericanos de Luisiana, pero lo cierto es que en la primera mitad del siglo
XX, la diferencia no estaba tan clara, pues blancos y negros participaban de
los mismos sones. Fue a partir de finales de los años 30 cuando la relación
entre blancos y negros cajún comenzó a degradarse, hasta el punto de que el
propio Amédé Ardoin fue asesinado por el Ku Klux Klan al finalizar una
actuación. En esa tesitura, la música cajún blanca comenzó a derivar hacia el Country
y, mientras que los negros lo hicieron hacia el Blues. En esa época, a su
música se la llamaba La-la, aunque paulatinamente esta
denominación fue sustituyéndose por la de Zydeco. Las primeras grabaciones de
campo de la música Cajún negra, hechas por John Lomax en Luisiana, incluye un
tema denominado “Cajun Negro Fais Dodo Tune”, interpretado por Ellis
Evans (armónica) y Jimmy Lewis (tabla de lavar o
washboard), y la primera versión conocida de ”Les haricots sont pas salé”,
interpretada por Austin Coleman y Joe
Washington Brown, cantada a capella. A comienzo de los años 40 el Zydeco
seguía conservando una fuerte influencia Cajún: preponderancia del acordeón,
presencia del violín y uso de temas tradicionales. Sin embargo, de forma
paulatina el Blues y otros ritmos negros, fueron introduciéndose en la
temática Zydeco. Clifton Chenier introdujo un cambio
importante respecto a la tradición Cajún sustituyendo el acordeón
diatónico por el acordeón a piano. Además, estableció una línea predominante en
el desarrollo del Zydeco, a la vez comercial y respetada, que marcó las décadas
siguientes y le valió el mote de “Rey del Zydeco”. Los músicos más
recientes de Zydeco han ido perdiendo parte de la influencia del Blues,
sustituyéndola por influencias del Góspel, Soul, música Disco
o Rap,
por lo que es una de las pocas (si no la única) música rural negra que sigue
siendo auténticamente popular y viva. El Zydeco ha evolucionado para convertirse
en un testimonio de los pioneros, aquellos que trabajaron en los campos bajo el
sol, y aquellos continuaron adaptándose durante los buenos y malos tiempos. Lo
que es más importante es que, el Zydeco es para aquellos que eligen
celebrar, bailar y amar a pesar de los obstáculos que pueden haber encontrado
en la vida.
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