Gallarda
La Gallarda fue una forma musical y dancística del Renacimiento, popular en toda Europa en el siglo XVI. Se la menciona en manuales de danza de Inglaterra, Francia, España, Alemania e Italia, entre otros. Los ejemplares más antiguos de esta danza se conservan en la ciudad de París, aunque su origen es italiano. La Gallarda es improvisada, con los danzarines combinando patrones de pasos que ocupan uno o más compases de música.
La Gallarda empleaba gran
variedad gran variedad de saltos y movimientos energéticos de piernas,
movimientos parecidos al de dar puntapiés, con el torso rígido y pequeños o
grandes brincos. En una medida, la Gallarda tiene típicamente cinco
pasos. La función de la Gallarda es ir unida a otra danza,
principalmente una Pavana, como es el caso de “God Save the Queen”, una
obra moderna que sigue esta estructura y que es el himno oficial del Reino
Unido. También puede estar unida a otros tipos de danzas, aunque no tan
frecuente como la Pavana. Es semejante al Saltarello y a la Romanesca,
con pasos para la danza similares a estas dos pero más vivos, con más fuerza y
vigor, combinando pasos sencillos y los cinco pasos ya mencionados, aunque en
su estilo musical no hay alguna diferencia. La Gallarda se llamó así
porque al bailarla uno tenía que estar gozoso y animado. Se diferenciaba de
otras danzas que a pesar de que se bailaba en parejas, cada cual bailaba
separado, no siempre la dama era llevada de la mano cuando se bailaba sino que
cada uno de estos bailaba separado. Fue el baile favorito de la reina Isabel I
de Inglaterra. Como prueba de que era un baile vigoroso, puede mencionarse un
informe del historiador John Stanhope, cuando la reina promediaba sus cincuenta
años: “la reina está tan bien como se lo aseguró. Sus ejercicios habituales son
seis o siete Gallardas en un día, además de tocar música y cantar”. Además de usarse como danza completa, los pasos de la Gallarda
se usaron dentro de otras formas de baile. Por ejemplo, en el manual de danza
de Fabritio Caroso (Italia, siglo XVI), y de Cesare Negri, las danzas desarrolladas
incluían una sección de “Gallarda”. Un paso especial que se
utilizaba durante la Gallarda era denominado “la volta”,
un acercamiento cerrado e íntimo con la pareja, con la dama elevada por el aire
y ambos rotando 270 grados, dentro de un período de seis tiempos. ”La volta”
fue considerada muy escandalosa y muchos maestros de baile consultaban antes de
obligar a realizarla.
Con el reinado de Luis XIII, hombre muy religioso, “la
volta” fue suprimida. Otro paso especial utilizado durante una Gallarda
era el “salto del fuego”, descrito en el libro de danzas de Negri, que
consistía en un giro de 180 a 360 grados, durante el cual el danzarín pateaba a
una altura emdia entre la rodilla y la cintura. Los ejemplos más antiguos que
se conservan de esta danza son “Six Gallairdes et Six Pavannes”
(1530), de Pierre Ataingant; ”Quatorze Gaillardes Neuf Pavannes”
(1531), “Intabolatura Sopra Lauto” (1546), de Giulio Abondante; “Intabolatura
de Lauto” (1546), de Antonio Rotta; y “Gaillarde-Pavanne
N°6”.
En épocas de Luis XIV la Gallarda murió totalmente. Sin
embargo, la Gallarda sobrevivió hasta bien entrado el siglo XVII.
Composiciones musicales en forma de Gallarda parecen haberse escrito e
interpretado mucho después de caer el baile en desuso. En las Suites y otras
obras, la Gallarda a menudo cumple un rol de “post-danza”, que sigue e
imita a otra pieza. El nombre de esta danza se utilizó también ocasionalmente
para otros tipos de música. Por ejemplo, la serie de temas y variaciones
denominadas Gallarda, de Juan Cabanilles, pero que no guardan
semejanza alguna con la danza tradicional.
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