De fuerte contenido reivindicativo, la Canción Protesta se caracteriza por
su contenido político y social. Se pueden fijar sus precursores en las
canciones sindicalistas y partidistas de finales del Siglo XIX e incluso en los
himnos de las revoluciones liberales. Uno de los grandes precursores fue el
sindicalista Joe Hill. Más inmediatas son las canciones populares de la Guerra
Civil Española y las canciones de la Resistencia durante la II Guerra Mundial.
Si bien puede hablarse de precursores, la Canción Protesta como tal nació entre
las décadas de 1940 y 1950 en distintos países: en EEUU, con Pete
Seeger, Woodie Guthrie o Malvina Reynolds; en Latinoamérica
con Violeta
Parra, Alfredo Zitarrosa, Los Olimareños y Atahualpa
Yupanqui; y en Francia con Edith Piaff, Georges Brassens y Jaques
Brel entre otros. Pero fue en los años 1960-1970 donde alcanzó mayor
difusión y repercusión. Los precursores de la Canción Protesta en España, desde
principios de los años 60, son Chicho Sánchez Ferlioso, con
canciones muy comprometidas; Paco Ibáñez desde Francia, poniendo
música a los poetas españoles de todas las épocas; Ramón, desde Valencia, el
primero en musicalizar a poetas catalanes; o Mikel Laboa, cantando en
Euskera. La Canción Protesta española estuvo ligada al movimiento
antifranquista; la denuncia de la situación de los más desfavorecidos
(campesinos, obreros, inmigrantes); la reivindicación cultural popular; el rescate de poetas prohibidos y de lenguas y dialectos soterrados por el régimen
franquista.
En Latinoamérica en los años 60, 70 y 80 fueron la época de mayor auge de
la Canción Protesta con artistas en Argentina como Nacha Guevara, Mercedes
Sosa o León Gieco. En Uruguay, el famoso Canto Popular con
artistas como Alfredo Zitarrosa, Daniel Viglieti, Aníbal
Sampayo y José Carabajal, entre otros. En Chile surgió el movimiento de
la Nueva
Canción Chilena con Víctor Jara, Violeta Parra, Inti
Illimani y Quilipayún entre otros. En ocasiones, algunos de los cantantes
estaban directamente ligados a partidos políticos, llegando casi a asumir casi
el papel de “cantante oficial” del partido, tal es el caso de Ali
Primera (ligado al Partido Comunista de Venezuela), o Víctor
Jara (ligado al Partido Comunista chileno). En Cuba, Carlos
Puebla, Pablo Milanés y Silvio Rodríguez hicieron canciones
de corte propagandístico de la Revolución Cubana, y ya en los años 80, Carlos
Mejía Godoy hizo lo mismo con la Revolución Sandinista de Nicaragua. En
la década de los 70 la Canción Protesta tuvo un papel importante en Puerto
Rico. La mayoría de los cantautores se dedicaban a criticar y a promulgar el
disgusto que había en la isla con el gobierno de EEUU. Esta música fue ligada a
los músicos y partidos que favorecían la independencia de Puerto Rico. En la
década de los 80 apareció en chile el grupo de Rock Los Prisioneros, cuyas
canciones de protesta se convirtieron en un referente obligado de los
movimientos antiditactoriales (sobre todo en contra el gobierno de Pinochet).
Mientras tanto, a partir de los 90 surgieron bandas como Molotov o Mano
Negra, cuyas canciones representan a una gran cantidad de gente.
0 comentarios: