Demasiadas Noches: Son Nica (Nicaragua)

El Son Nica es un género musical nicaragüense, considerado uno de los más representativos de ese país, tanto que ha llegado a ser reconocido entre los Símbolos Nacionales no oficiales y como parte del folklore popular de esta nación. El Son Nica incorpora la marimba de arco en una composición de trío junto con la guitarra y el requinto (guitarra pequeña de cuatro cuerdas). Luego se han incorporado maracas y las llamadas pailas, que incluyen timbales, platillos o címbalos y cencerro. Este género ha sido adoptado por la mayoría de los compositores nicaragüenses lo que le dio una muy alta expresión al canto de los sentimientos nacionales. Para las letras de las canciones se utiliza el registro del habla nicaragüense (toponimias, modismos, regionalismos), y la idiosincrasia de los campesinos que enriquecen el español local. El Son Nica abarca temas románticos y nostálgicos que describen los paisajes del campo, así como las vivencias de la realidad diaria de los campesinos, tal como lo expone “Caballito Chontaleño”, de Camilo Zapata, considerada la primera composición del género. Así mismo, Zapata delineó los tres grandes temas del Son Nica: el costumbrismo, lo social y el amor. Por ejemplo, “El Peón” es la primera canción de protesta escrita en Nicaragua, en la que se denuncia la explotación de los campesinos por parte de los terratenientes.

Camilo Zapata

Antes de la aparición del Son Nica, sólo existían dos tipos de canciones en Nicaragua: las canciones anónimas de tipo colonial (Romances y Corridos), y las canciones de ritmos extranjeros (Bolero, Vals, Pasillo, etc.) El Son Nica apareció en 1934, con “Caballito Chontaleño”. Esto coincide con la aparición del Movimiento de Vanguardia en Granada, que pretendía la caracterización de una identidad nacional después de los estragos que dejó la ocupación norteamericana en Nicaragua entre 1926 y 1933. Camilo Zapata abrió las puertas por las que después entraron otros artistas. Generacionalmente le siguió Erwin Kruger, el acuarelista de la música nicaragüense por la poesía de sus canciones. Kruger le incorporó al Son Nica influencias del Corrido mexicano y del Son Huasteco mexicano. Además internacionalizó al Son Nica llevándolo a la República Dominicana y a México, país en el que vivió varios años. Otro pionero fue Isaac Carballo, el retratista de personajes y paisajes, y el que se metió más en el tema social, porque escribió canciones de denuncia contra la explotación capitalista. Otto de La Rocha es el gran romántico del Son Nica, porque el tema preponderante en sus canciones es el amor. También aparecieron otros cantautores como Víctor M. Leiva y Justo Santos, este último autor de “La Mora Limpia”, considerado como segundo himno nicaragüense. En línea directa con los pioneros siguen Carlos y Luis Enrique Mejía Godoy, y otros compositores de los años 70 y 80 que incorporaron a su temática la lucha revolucionaria. Luego sigue Salvador Cardenal, que incorporó el tema medio-ambiental en sus composiciones. En los últimos años Juan Solórzano y Ramón Mejía continúan, cada uno con su estilo, con la tradición del Son Nica.