Rockabilly (EEUU)
El Rockabilly (Rock + Hilbilly) es un estilo musical que surgió hacia mediados de los años 50 en Estados Unidos. Los fanáticos de la TV recordaran aquella vieja serie llamada Los Beverly Ricos. Originalmente la serie llevaba el nombre de The Beverly Hillbillies, nombre que remite a la cultura de la familia protagonista, arraigada en el campo y amante de la música country. Cuenta la historia que el Folk nació allá por el 1900, fruto de la fusión entre la población de distintas culturas que emigró desde Europa a EEUU. La celebre “Conquista del oeste”, estableció a esta heterogénea mezcla en las montañas Apalaches con lo que ganaron el nombre de Hillbillies (gente de las colinas). Los distintos ritmos e instrumentos de cada una de estas culturas originaron una nueva música, la que recibió la denominación de Hillbilly. Su sonido incluía guitarras, banjo, violín, mandolina, arpa y órganos. El componente blanco del Hillbilly y el negro del Rhythm & Blues se unieron en una nueva forma musical allá por el 54 con Bill Halley. Para muchos el Rockabilly, no es más que Rock and Roll al estilo country, sin embargo, cuenta con características particulares. La mayoría de sus cultores eran blancos aunque habían tenido maestros negros. En lo musical se destaca la presencia de un solo de guitarra, bien blusero, un contrabajo golpeado y la batería tocada con cepillo. Pero el rasgo característico de los rockabillieros era su manera de cantar, empleando todo tipo de ruidos, onomatopeyas, cortando palabras, agregando otras. Los motivos de sus letras tienen mucho de rebeldía y eso forjo la base para el concepto de “actitud” que se ha asociado desde entonces con el rock.
En la década del 50 los jóvenes rebeldes andaban enfundados en cueros y montados en sus motos con expresiones adustas, patillas y jopos que se bamboleaban. Era la época de autos enormes, canciones sobre presidiarios y atardeceres en autocines viendo películas clase B sobre marcianos invasores. Ese fue el universo estético del Rockabilly. Entre las grandes estrellas de este estilo se destacan Elvis Presley, Carl Perkins, Johnny Cash y Gene Vincent, entre otros. Para el año 59, el Rockabilly estaba eclipsado. Durante los años 60 permaneció estancado pero volvió a reaparecer en los 70 en el Reino Unido con Crazy Caravan o Matchbox, grupos que veneraban desde la distancia a sus héroes de los años 50 sin alcanzar su nivel creativo, ni aportar sangre fresca al género. En la segunda mitad de la década, el norteamericano Robert Gordon intentó rescatar aquel sonido fascinante, más desde la óptica revivalista que realmente vital. Era un estilista, no un verdadero creador, pero sus dos primeros discos, apoyados por la guitarra de Link Wray, siguen sonando impecables. Sin embargo, la resurrección del espíritu Rockabilly debió esperar hasta 1980 con la sorprendente aparición de los Stray Cats, grupo formado por tres desvergonzados jovencitos nacidos en Long Island. Brian Setzer, cantante y guitarrista, se unió a Lee Rocker en contrabajo, y Slim Jim Phantom en batería, y se lanzaron a conquistar al gran público a base de pelos grasientos, tatuajes felinos, y muchísimo Rockabilly. Acompañados por su manager dejaron EEUU, en donde eran solo un grupo de roqueros anacrónicos, y se instalaron el Londres, en donde causaron gran excitación en la siempre hambrienta escena londinense. Luego de grabar dos discos, regresaron a su país en donde repitieron el triunfo europeo. En la actualidad existe un sinfín de grupos en todo el mundo que retoman este estilo musical, como Kim Lenz’& the Jaguars y His Fly-Rite Boys. De la unión del Rockabilly y el Punk, nació el Psicobilly, de mayor crudeza que aquel estilo de los 50. En la Argentina no tiene mucha trascendencia, porque es tan norteamericano como Elvis. Pero en los años 80 aparecieron algunos grupos que se atrevieron a cultivarlo, como Los Valiants; Pelvis o Casanova y más tarde, con Historia del Crimen. El contrabajista Nicolás Valle desde hace cinco años organiza el B.A. Stomp!; único festival local de Rockabilly y Surf. En su ultima edición contó con la participación de The Monsters, de Suiza; The Butcher’s Orchestra, de Brasil, y Guitar Wolf, de Japón. Hoy se recuerda al Rockabilly como una de las corrientes indispensables para entender la historia del Rock.
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