El Carnaval de Samba de Asakusa o Carnaval de Asakusa es una celebración anual que se lleva a cabo en el distrito de Asakusa, Tokio. Es una celebración que parece fuera de lo común debido a la considerable distancia entre Japón y Brasil y a la notable minoría católica del país.
Sin embargo, Brasil cuenta con una comunidad japonesa de unas 300.000
personas únicamente en São Paulo, siendo la más grande fuera de Japón, por lo
que las influencias de ambos países son algo notorias. La primera edición de
este festival tuvo lugar en 1981. Se dice que Ban Junzaburō, un
comediante del barrio, fue el primero en proponer la celebración de este
festival preocupado por la falta de vitalidad que sufría su lugar de
nacimiento. Desde entonces se realiza todos los años, excepto en 2011 por el
gran impacto del terremoto de Tohoku. No está asociado con el carnaval antes
del inicio de la Cuaresma, sino que se celebra en agosto. Este carnaval es todo
un acontecimiento en el distrito, ya que refleja una cultura completamente
distinta a lo que el país está acostumbrado a ver. Al principio, esta fiesta
casi fue un fracaso, fue un intento descafeinado de lo que era el carnaval
brasileño, pero sobrevivió y creció hasta convertirse en lo que es hoy. Algunos
lo llaman “Matsuri Hadaka”, que significa “fiesta desnuda”, que se refiere
a los diminutos trajes que se usan los participantes. Las calles del distrito
de Asakusa se llenan de música Samba, mientras que los miles de
participantes desfilan mostrando un increíble espectáculo de bailes, colores y
escenas visuales.
El Carnaval de Asakusa se conforma
especialmente de un desfile en el que alrededor de 20 grupos de Samba
pasean a lo largo de las calles de Asakusa. Estos grupos compiten a través del
baile, el canto y presentaciones teatrales en las calles del distrito. Cada
equipo lleva a cabo su propio tema y lo expresa a través de los trajes, las
carrozas y su baile. Además, cada agrupación posee una Rainha de Bateria, quien
es la bailarina principal, la cual es acompañada por una pareja de bailarines. La
realización de los Carnavales de Asakusa es un proceso largo que lleva mucho
esfuerzo, especialmente en las carrozas y trajes, los cuales normalmente cuenta
con cientos de colores, plumas y brillos para resaltar entre la multitud. La
mayoría de los participantes son mujeres jóvenes, pero también hay niños,
hombres y personas mayores que desean aportar un mágico espectáculo entre las
calles del distrito. Los grupos más grandes tienen más de 250 artistas, los
cuales en su mayoría desfilan a pie. Estos grupos se dividen en dos: Primera y
Segunda División o S1 y S2. La S1 está constituido por 8 equipos, los cuales
poseen al menos 150 personas y por lo general son los equipos con mucha más
experiencia. La S2 está constituido por unos 12 equipos de 30 a 150 personas
cada uno y por lo general son personas sin tanta experiencia, algunos sigo
amateurs en el arte de los desfiles de carnaval brasileño.
Cada equipo es
evaluado por un jurado y pueden ser promovidos o degradados dependiente de su
calificación y actuación durante el desfile. Algunos equipos practican
intensamente durante todo el año, haciendo todo lo posible para crear
actuaciones fieles a la tradición de la Samba de Brasil. Otros están
solamente por diversión y por lo general, se enfocan en el espíritu de carnaval
y en la emoción que transmiten. Algunos grupos incluso han adaptados grandes
espectáculos glamorosos, mientras que otras escenas de comedia y chiste. Algunas
de las agrupaciones cuentan con una larga trayectoria de desfiles, unos son tan
antiguos como los mismísimos carnavales y provienen de diversas ciudades y
distritos como Hanna, Chika, Noge, Shinagawa, Osaka, Urayasu y por supuesto,
Tokio. Los jueces escogen a los ganadores; sin embargo, también se toma en
consideración la votación del público. Además, también se ofrecen premios
adicionales que son otorgados gracias a los patrocinadores de las fiestas. Los
carnavales han ganado una gran importancia. De hecho, los ganadores de los Carnavales
de Río de Janeiro, son invitados a asistir y a participar en los Carnavales
de Asakusa. Cada año, los Carnavales de Asakusa reciben en sus
calles al menos 500.000 personas para disfrutar de este espectáculo tan
interesante y multicolor.
Asakusa fue una vez el centro importante de Tokio,
por lo que por varias décadas fue el distrito ejemplo de la ciudad. Sin
embargo, durante la década de los 80, el distrito perdió algo de brillo e
importancia, dando como resultado una Asakusa algo despreciada, en el olvido y en
mal estado. Por esta razón, el distrito decidió revitalizarse con algún evento
particular que permitiese volver a la época de mayor importancia. Aunque
parezca extraño, Brasil posee una gran cantidad de inmigrantes japoneses,
convirtiéndose en el tercer país con mayor población de japoneses en el mundo.
La migración de los japoneses a Brasil comenzó a finales del siglo XIX y
principios del siglo XX. Estos japoneses migraron a Brasil con la finalidad de
trabajar en las plantaciones de café que buscaban fuerza humana. En la
actualidad residen unos 2 millones de nipones en Brasil, contando unos 300.000
solo en São Paulo. Durante la década de los 30 del siglo XX, Japón necesitaba
mano de obra, por lo que permitió la entrada de personas que contaran con descendencia
japonesa hasta la cuarta generación, incluyendo en los puestos de trabajo a
cientos de miles de brasileños hijos y nietos de japoneses. En la actualidad
unos 200.000 brasileños viven en Japón, por lo que no es de extrañarse que
ambas culturas se hubiesen fusionado. El distrito de Asakusa estaba
acostumbrado a realizar festivales con frecuencia debido a que se encuentra en
las cercanías de un templo. Sin embargo, la Samba era muy poco
conocida, no solo en el distrito, sino también en todo Japón.
El Carnaval
de Asakusa comenzó como un proyecto del alcalde de Taito, quien invitó
al grupo ganador del Carnaval de Río de ese año para
llevar a cabo una exhibición. Hoy en día, el Carnaval de Asakusa es
uno de los eventos más conocidos de Tokio, al que asisten anualmente unos
500.000 espectadores. La popularidad del carnaval sin duda ha sido ayudada por
la población brasileña de Japón, en parte compuesta por los descendientes de
emigrantes. La principal atracción del carnaval es el desfile de Samba
que los diversos equipos y Escuelas de Samba llevan a cabo en
las calles del distrito. Alrededor de 3.500 personas de diversas agrupaciones y
escuelas de todo Japón se acercan al distrito para formar parte de uno de los
mayores eventos anuales. Cada agrupación se encarga de diseñar una temática en
particular, la cual será el punto de partida para el diseño de trajes,
decoraciones, coreografías y carrozas. Las temáticas pueden ser tradicionales y
contar con los mismos elementos de un carnaval brasileño o pueden ser únicos
con características elegantes o agraciadas y humorísticas. Los desfiles son
acompañados por una escenografía diversa y varias carrozas igualmente decoradas
con flores y brillantes. Cada agrupación cuenta con acompañamiento, bien sea en
vivo o reproducida. El desfile del carnaval es el evento principal por excelencia.
Los que comienzan los desfiles son las agrupaciones que perdieron el año
anterior o las que se están integrando nuevamente luego de un tiempo de
descanso. Una vez terminado el evento, se procede a la votación por parte del
público y se anuncian los ganadores en las diferentes categorías. Finalmente,
todos los equipos que participen en el desfile, deben confirmar su intención
para participar en los próximos Carnavales de Samba de Asakusa a
través de una inscripción.
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