viernes, 22 de junio de 2018

Sertaneja (Brasil)



Sertaneja es el nombre genérico que designa a la música producida a partir de la década del 20 del Siglo pasado, por compositores urbanos y rurales del Brasil. Anteriormente era conocida como Modas, Toadas, Cateretês, Chulas, Emboladas o Batuques. Este tipo de música apareció sin ningún tipo de influencia de la música norteamericana o europea. Sus precursores comenzaron a ser populares con la Toada de 1914 Cabloco di Caxanga, de Joao Pernambuco. La música Sertaneja como tal en 1929, cuando Cornélio Pires, compositor, escritor, investigador y humorista, comenzó a grabar fragmentos de canciones tradicionales en la región cultural caipira, en el centro-sur brasileño, zona conocida como Paulistânia, que comprende los estados de São Paulo, Mato Grosso, Goias y Mina Gerais. En la época de las primeras grabaciones de Cornélio Pires, el género era conocido como música caipira, cuyas letras evocaban la belleza bucólica y romántica del paisaje, así como el modo de vida del hombre del interior en oposición a la vida del hombre de la ciudad, caracterizándose por una melodía simple y melancólica. El caipira utilizaba instrumentos típicos del Brasil colonial como violas, acordeón y gaitas. El adjetivo Sertanejo, se refiere a todo lo que es propio de los Sertões, o sea, el interior rural brasileño. De una manera más amplia la música Sertaneja sería también el Baião, el Xaxado y otros ritmos del Norte y Nordeste. Tradicionalmente esta música es interpretada por dúos, generalmente de tenores, con voz nasal y uso del falsete característico. El estilo vocal se mantuvo relativamente estable, mientras la instrumentación, ritmos y melodías, incorporaron elementos de otros géneros. Entre los dúos pioneros en grabar se destacaron Zico Dias y Ferrinho; Laureano y Soares o Mandi y Sorocabinha. Estas primeras parejas cantaban sobre temáticas conectadas a la realidad cotidiana, como en el caso de La Revolución de Getúlio Vargas y La Muerte de João Pessoa, grabadas por Zico Dias y Ferrinho en 1930, o La crisis y La Carestía, grabadas en 1934 por Mandi y Sorocabinha.
La historia de la música Sertaneja puede dividirse en tres etapas: la primera de 1929 a 1944, en la que prevaleció la música caipira o Sertaneja rural; la segunda desde la posguerra hasta los años 60, que fue una fase de transición; y la tercera, que va de los 60 hasta la actualidad, donde hizo su aparición el estilo romántico. En la década del 40 la radio se convirtió en un vehículo importante para la difusión de la música. Después de la Segunda Guerra Mundial se introdujeron nuevos instrumentos como el arpa, y se recibieron nuevas influencias de otros estilos como el Mariachi, la Polca paraguaya, el corrido y las rancheras mexicanas. La temática fue volviéndose cada vez más romántica, conservando sin embargo, un carácter autobiográfico. En esta etapa de transición se destacaron Inanha y Cascatinha; Limeira y Zezinha; las hermanas Galvão; y Palmeira y Biá. La fase moderna de la música Sertaneja se inició a finales de los 60 con la introducción de la guitarra eléctrica y el llamado ritmo joven. Por ese tiempo el artista más destacado era Sérgio Reis, que volvió a grabar el repertorio tradicional Sertanejo, contribuyendo a una penetración más amplia del género. El ámbito de difusión de esta música era originalmente los circos, los rodeos, y principalmente las radios AM. En los 80 aparecieron las FM, que llevaron a más lugares la música brasileña. En esa misma década comenzó una explotación comercial masiva del género. Aparecieron innumerables parejas, que pasaron a ser llamadas Dúos Sertanejos, con Chitãozinho y Xororó, y Leandro y Leonardo como los más importantes. El fenómeno alcanzó su apogeo entre 1988 y 1990. Después de eso comenzó un decaimiento en la presencia en los medios y la música Sertaneja perdió renombre. Sin embargo, desde el 2000 se inició un Revival del estilo, debido principalmente al éxito de dúos como Cesar Menotti y Fabiano; Zezé di Camargo y Luciano; Bruno y Marrone o Edson y Hudson. La película “Os Filhos de Pedro” refleja la vida del dúo Zezé di Camargo y Luciano y el origen humilde de la mayoría de los dúos sertanejos en el interior de Brasil. Actualmente se realizan rodeos en todo el Brasil donde se presentan los nuevos artistas, atrayendo cada vez más público.




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