Britpop (Gran Bretaña)

El Britpop es un género musical nacido a mediados de los años 90 en Gran Bretaña, caracterizado por la aparición de bandas influenciadas por grupos de los 60 y los 70, como los Beatles y los Kinks. Fue muy popular entre 1994 y 1996. Este movimiento nació como una reacción frente a otros estilos de moda de finales de la década del 80 y principio de los 90. En los inicios de éste género, la clásica estructura musical de cualquier banda preexistente, tropezaba ante los nuevos estilos derivados de la música electrónica. El Shoegaze de finales de los 80 respondió mediante la realización de canciones largas, psicodélicas y repetitivas. Tras esto, hubo un corto pero crucial movimiento denominado “Nueva Ola de la Nueva Ola”, que fue crucial en el reordenamiento del Pop británico. Aunque los grupos Britpop no tenían un sonido único que los uniese, los medios de comunicación los llamo primero una “movida” y más tarde, “un movimiento cultural nacional”. Si bien el Britpop se volvió importante cerca de 1993-1994, es difícil determinar exactamente cuándo comenzó el movimiento, aunque algunos sostienen que fue con el single de Blur, Popscene, y el de Sueders, The Drowners. Los grupos Britpop tuvieron muchísima influencia de la música de guitarra británica de los años 60 y 70, aunque las influencias concretas variaban: Blur y Oasis tenían preferencia por el sonido de los Kinks y los Beatles, mientras que Elastica prefería el Punk Rock artístico. Sin embargo, todos proyectaban una sensación de reverencia por los sonidos del pasado. La Movida Madchester fue la antecesora inmediata del Britpop, ya que su énfasis en pasárselo bien y en canciones pegadizas, daban una alternativa al Shoegaze. Estilísticamente las bandas de Britpop dependían de estribillos pegadizos con letras que guardaban relación con los jóvenes británicos de su misma generación. Las imágenes asociadas al Britpop eran esencialmente de la clase obrera británica. Blur introdujo un elemento crítico a éste movimiento: un estilo de vida Mod, con influencia del estilo de vida inglés de los años 60. El término Britpop había sido usado hacia finales de los 80 por la revista Sounds, refiriéndose a bandas como The La’s, Stone Roses e Inspiral Carpets.

Britpop se comenzó a utilizar al mismo tiempo que la palabra Britart, que se refiere al trabajo de artistas británicos modernos como Damien Hirst. Sin embargo, no fue sino hasta 1994 cuando el término entró en el conocimiento popular, siendo usado extensivamente por la prensa musical y los DJ’s de radio. Su influencia fue reconocida por un artículo de The Guardian, en el que los editores del diccionario inglés de Oxford declaró a Britpop como una nueva palabra que ejemplificaba mejor a 1995. Junto a Oasis, Blur, Suede y Pulp, hubo otros participantes en el Britpop que dominaron la escena musical por los siguientes años, incluyendo a Ash, Elastica, Supergrass, The Bluetones, The Boo Radleys, Space y Gene. Aunque la mayoría de las bandas asociadas con el Britpop (a voluntad o no) eran inglesas, había excepciones como Super Furry Animals, Catatonia o Stereophonics, que eran galeses; The Gyres y The Supernaturals, que eran escoceses; y Ash que eran de Irlanda. Esto hizo que incluso que los medios locales llamaran al surgimiento de bandas galesas como Cool Caledonia. El Britpop ejerció un breve período de hegemonía cultural con la película Transpoiting, de 1996, cuya banda sonora se centró en éste tipo de música, con Blur, Elastica, Pulp y Sleeper. El programa TFI Friday fue considerada como el arma televisiva del Britpop. Los lanzamientos de 1997 por parte de Oasis y Blur fueron factores primarios en el declive del género que empezó a desacelerar. Elastica cayó víctima del abuso de drogas y no continuaron desde su álbum debut en 1995 sino hasta 1999. Menswear también falló en continuar su debut. Al final sólo emergieron Blur y Oasis con sus numerosos fans más o menos intactos. Algunas de las bandas, sintiendo que su tiempo se había terminado, se separaron, mientras que otros continuaron grabando y lanzando producciones frente a reducidas ventas y apatía de las críticas.