sábado, 3 de julio de 2021

Simpsonwave

 

La noche del 9 de noviembre de 1989, a menos de dos meses para finalizar la década de los 80, caía el mayor símbolo de la Guerra Fría. La destrucción del Muro de Berlín fue el comienzo de una nueva era que ponía fin a aquel mundo dividido en bloques y a la alocada década de los 80.

Y una familia de tez amarillenta iba a marcar el principio de esa era. Al otro lado del Atlántico, antes de que acabase el año, la cadena norteamericana Fox estrenaba oficialmente Los Simpsons. Destinada a convertirse en la serie de animación más exitosa de la historia, dominó durante once temporadas el panorama de animación para adultos, dejando episodios memorables como “Marge contra el monorriel”, “La última tentación de Homero” o “Don barredora”, entre otros. A partir de la duodécima temporada, aunque su éxito comercial continuó, la calidad de la serie comenzó a menguar de manera directamente proporcional al número de temporadas que iba sumando. Con el paso del tiempo, la entrañable familia de Springfield se convertiría en una parodia de sí misma a medida que los guiones se plagaban de situaciones estrambóticas más propias de, por ejemplo, Padre de Familia. Tanto es así, que los más aficionados distinguen entre los Simpsons “antiguos” y los “nuevos”; estos últimos que ya superan en temporadas a los clásicos, no vale la pena nivelarlos. ¿Qué cabría esperar de una serie que ya va por su trigésimo segunda temporada? Pero, aún con todo esto, está claro que la supervivencia de la archiconocida familia Simpson es uno de los últimos salvoconductos que le restan a los nostálgicos para hablar de aquellos días extraños en los que ni nosotros ni los springfieldianos teníamos celulares o computadoras de última tecnología. Veinte años después de aquel primer episodio en el que los trabajadores de la central nuclear no recibían la paga extra de Navidad, hacia 2010 y sin que nadie sospeche relación alguna entre ellos, empezaba a proliferar por Internet un nuevo estilo musical que se conoció como Vaporwave, mezclaba géneros como Witch House o el Chillwave y los pasaba por el filtro de la música de los 60 y 80. La idea, sobre todo por la estética que acompañaba al género (conocida como ”AESTHETICS”, repleto de esculturas greco-latinas, software, obras de arte embaldosados a cuadros, seapunk y filtros de imagen), fue entendida como una crítica a la cultura yupi de la década de los 80. La contradicción se encuentra en la evidente nostalgia que este género demuestra por los sonidos que la definieron. Sintetizador, secuenciador, samples, autotune, son palabras estrechamente ligadas a los años 80, pero también a esta corriente, Adan Harper, en un artículo para Dummy Magazine, llegó a calificar al género como una suerte de nuevo Punk por su crítica a la sociedad capitalista y consumista. 

El Vaporwave ha tenido una gran influencia en muchos artistas de Internet y tal vez sólo era una cuestión de tiempo para que el género cruzara caminos con uno de los programas más populares e influyentes del “prime time” televisivo de principios de los 90: Los Simpsons. Por su parte, los Simpsons fueron concebidos como una crítica a la sociedad norteamericana de la época. Matt Groenning se basó en su propia familia para crearlos, aunque Bart (alter ego del propio Groening) fue pensado para ser el protagonista, el carisma de Homero terminó por colocarlo de forma natural como el personaje principal. Teniendo en cuenta la fecha de su estreno puede decirse que la crítica se basa en la sociedad que Groening observó en la década de los 80, aunque esta no esté presente como en el Vaporwave, dirigida a la cultura Yuppie. La unión entre los Simpsons y el Vaporwave ha devenido en el surgimiento de un nuevo subgénero, conocido como Simpsonwave. Se trata de una serie de videos remixes que sobreponen clips estilizados de las primeras temporadas de los Simpsons con algunas de las canciones de productores como Blank Banshee, Macintosh Plus y Vektroid. Este mashup ha traído como resultado la creación de múltiples videos de diferentes usuarios de YouTube. Se ha rastreado el origen de este concepto a un video loop del 2015 subido a Vine por el usuario Spicster titulado “Bart On The Road”. 

El video tuvo más de 20 millones de loops y al poco tiempo, el youtuber Hothi publicó una versión extendida del track con nuevas imágenes de Bart en compañía de Martin, Nelson y Millhouse en un auto. El video va acompañado por la canción “Resonance”, de Home. Una vez subido a YouTube se desató la fiebre por el Simpsonwave. El resto es historia: los millennials que aman fotografiar agua Evian y estan en un estado constante de depresión comenzaron a postear el video en sus páginas de Facebook. Eso se convirtió en una tendencia y tan rápido como lo hizo el seapunk, los clips de Los Simpson con música brillante y atarantadora comenzó a convertirse en un género musical underground. Naturalmente, más gente empezó a hacer sus propios vídeos como es el caso de Lucien Hughes que en febrero de este año subió un vídeo titulado “Homer Scape - 1992” al que le siguieron varios más compilados en la playlist titulada “Simpsonwave”. Parte del éxito del Simpsonwave reside en el potencial que tiene para volverse viral, ya que además de llamar la atención de muchos seguidores de los Simpson, la manera en la que el video y la música se combinan, transmite un sentimiento extrañamente nostálgico para todos los que han crecido con esta serie y toda la cultura audiovisual de la que se nutre el género. Los clips utilizados provienen siempre de los llamados Simpsons “antiguos”. Con ellos se construye un relato en cada video, dotado de nostalgia. Así, algunos de los videos más exitosos como “Crisis” o “Sunday School”, condensan historias tan famosas como el cuasi-affaore de Homero con Margo Zavala, o la tormentosa infancia de Bart y su enamoramiento de la hija del reverendo Alegría. Otras creaciones de las más conocidas son: “Springfield Vice” (con la canción ”Girl Milk”, de Midnight Ride), “Dead Bart” (Vektroid); “Cool Kids” (“King Coffee”, de Melt).




Meet Lucien Hughes









































1 comentario:

  1. ¿Qué me iba a pensar yo que de la serie saldría una corriente musical? Continuáis rizando el rizo...

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