Los Aires de Lima son unos cantos de amor y desamor entre parejas, típicos en distintas faenas de trabajo o reuniones familiares. En Canarias existen muchas variantes del canto, cada una con diferente melodía y ritmo. Gran Canaria es la más rica, donde cada región tiene su propia versión, muy distintas entre sí.
En
La Palma, también son reconocidos en su folklore tradicional. El origen más
aceptado de los Aires de Lima en las Islas Canarias es Portugal, ya que también
se encuentran canciones similares en la región de Lima. Nada tiene que ver con
los cantos peruanos, sino que proviene de los pueblos ribereños de río Limia
(Lima en la lengua lusitana), a la que sin duda se rememora en Canarias al
denominar estos aires por ser originarios de allí. Esta pieza musical, que ya en
el siglo XVIII se practicaba en Canarias, es muy popular en Gran Canaria y La
Palma. En el caso de Gran Canaria, los Aires de Lima son un género musical
que tiene una fuerte presencia en toda la isla, que cuenta con cantadores
destacados en ciudades como Artenara, Ingenio, Valsequillo y Teror. En el resto
del archipiélago, los Aires de Lima de La Palma han sido
muy apreciados por expertos y público. Las letras de estas canciones son
lastimeras, conmovedoras y melancólicas. Históricamente han sido cantadas en
velas de parida (nacimientos), en duelos para amenizar el tiempo, en
descamisadas (Reunión de vecinos, entre laboral y festiva, cuyo fin era quitar
las camisas (hojas) a las piñas de millo. Dicha reunión solía concluir con
bailes y otras diversiones), y en reuniones intimas de los campesinos
destinadas a promover contactos amorosos. Antiguamente estos cantos se
realizaban sin baile. Raras veces las parejas se tomaban de la mano y se movían
lentamente de un lado a otro. Con el tiempo, se fue formando un baile sencillo
que constaba de giros y saludos. Actualmente, algunos grupos folklóricos lo
acompañan de baile. En 1975, el musicólogo Lothar Siemens recopiló más de 30
versiones de Aires de Lima de diferentes lugares de Gran Canaria, que
seguían un tipo melódico común. En Gran Canaria destacan los Aires
de Lima de Artenara, Ingenio, Tirajana, Teror y Valsequillo. El
comienzo de la copla es suave, la letra es conmovedora y mientras avanza se
vuelve más ofensiva, ordinaria e incluso más picante. En algunos casos,
terminaban con un verdadero tumulto. En Gran Canaria, los Aires de Lima se hicieron
populares por el canto más que por bailar, y de hecho tomaron el nombre de “Cantos
de Velorio”. En Agüimes, en cambio, “la Isa de la Parida”, que
durante nueve noches después del parto acompaña a las parturientas, se bailan
por familiares y vecinos. El canto consta de estrofas de cuatro versos y suele
ser cantada alternativamente por un hombre y una mujer. Rara vez tienen
acompañamiento de baile, si es que lo tienen, suele ser una pareja opuesta
bailando de un lado a otro tomados de la mano. En caso contrario, se establece
un baile sencillo que consta de giros y diferentes saludos. Algunos autores
opinan sobre los aires de lima: • Francisco Guerra Navarro: “Tonada popular que
se canta en algunos pueblos y pagos del centro y sur de la Gran Canaria. (No
sólo su nombre, sino su melodía y su cadencia revelan el origen peruano de los
Aires de Lima)”. • Lothar Siemens Hernández: “Estos aires se cantaban
antiguamente para matar el tiempo durante las descamisadas del millo, en las
velas de parida y en reuniones íntimas de los campesinos, destinadas a promover
contactos amorosos. Nada tienen que ver con los cantos peruanos, como se ha
llegado a pensar con no poca ingenuidad.
Aunque rara ya, su peculiar melodía,
que perdura más intensamente en Gran Canaria, es de estructura enteramente
modal y existe en el Minho portugués, en pueblos ribereños del río Limia (Lima
en lengua lusitana)”. • Orlando García Ramos: “Danza apicarada. Su traducción
podría ser “bailes de la lima verde” y su distribución en el archipiélago es en
las islas de Las Palmas, Tenerife y Gran Canaria. En esta última se han
popularizado como cantos y no como bailes, tomando la denominación de “cantos
de velorio”, excepto en la villa de Ingenio, al sur de Gran Canaria, donde los Aires
de Lima son bailables, llamándose “Isa de la Parida”, sin que por ello
pierda su condición apicarada. Los Aires de Lima son los cantos y
bailes con los que se acompaña a la parturienta, durante las nueve noches
siguientes al alumbramiento. Estos velorios que protagonizaban los familiares,
vecinos y amigos de la recién parida, eran animados además con juegos como
“sube el mono”, “que se corra la zapatilla”, “el juego de la flor”, etc., y
acompañados de bebidas, golosinas y tentempiés, como el suculento ambigú”. •
José Luis Concepción: “Baile de controvertido origen entre los estudiosos del
folklore musical canario, ya que unos consideran que es de origen americano y
otros que es una aportación portuguesa. Lo cierto es que perviven en Canarias
diferentes modalidades que carecen, evidentemente, de un tronco común, ya que
son radicales las diferencias de los Aires de Lima palmeros con los
conservados en la isla de Gran Canaria”. • Francisco Navarro Artiles: “Desde el
punto de vista métrico, se presentan generalmente en estrofas de cuatro versos
octosílabos: varía la rima, siendo la más frecuente la asonante en los versos
2º y 4º; el contenido suele ser procaz e hiriente. Los Aires de Lima los cantan
dos personas alternativamente; con frecuencia un hombre y una mujer. Las
indagaciones hechas en la tradición viva hoy nos dan noticias de que los Aires
de Lima eran, y son aún, en escasa medida, cantares que se daban en
cualquier baile y no letra especial para un baile concreto”.
Fuentes:
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