miércoles, 5 de noviembre de 2008

Música Gitana




Desde sus orígenes en la India, hace más de 1000 años, hasta su diáspora alrededor del mundo, los gitanos han logrado sobrevivir y mantener sus tradiciones y creencias, adaptándose a cada cultura con la que conviven y aprendiendo de ella. Notables por su talento como músicos y danzantes, los gitanos son seres casi míticos y mágicos, representando a gente fuera de los confines y realidades varias del mundo. A lo largo de su historia, y especialmente desde que llegaron a Europa, a menudo fueron acusados de brujería. Su vida nómada, sus peculiares costumbres y el secreto que hacían de su lengua y sus instituciones, los hacían chivos expiatorios favoritos de los miedos y tensiones de las sociedades que visitaban. Los gitanos son un símbolo contradictorio de misticismo, libertad, miedo, independencia y fuente de inspiración artística. Durante mucho tiempo la música ha jugado un papel central tanto en la vida comercial como social de los gitanos y han hecho grandes contribuciones en varios países. Introducen en su música en todo lo que les gusta, sea una armonía española o un ritmo turco. En Argentina la influencia musical más conocida seguramente es el flamenco cuyos orígenes son inciertos y no se conoce con exactitud las causas que originaron este arte popular donde se combina la música oriental y la de Andalucía. Es posible imaginar la génesis mundial del flamenco como un crisol de ingredientes orientales que fueron fundiéndose a lo largo de la historia en territorio andaluz. Luego, los gitanos habrían sido los refundidores de toda esta música oriental andaluza. A finales del siglo XVIII después de que Carlos III promulgase el cese de hostilidades a los gitanos, el flamenco entró en su primera etapa de difusión fuera del hogar caló (gitano). El pueblo andaluz se interesó por estos modos expresivos hasta entonces ignorados. El flamenco mantiene su íntima y dramática condición ritual dentro de los reductos privados de la gitanería y sufre ciertos reajustes, sobre todo en los estilos "festeros", para atraer el interés del público payo (no gitano). Es utilizado como un producto de transacción comercial que le permite al humano sobrevivir. En el este europeo la identidad musical de los gitanos se logró a fuerza de coexistencia de influencias árabes, turcas, rusas, griegas, italianas e hindúes. Esto dio como resultado una masa de sonidos, lenguas y tradiciones que hicieron implosión en las comunidades gitanas de Serbia, Bosnia, Macedonia, Albania, Hungría, Rumania y Bulgaria. A esta proliferación desbordante esparcida por la itinerancia de los gitanos, se les agregó durante el ultimo tercio del siglo XX, el ritmo del Rock and Rock. El grupo de gitanos más conocido en la Argentina es seguramente No Smoking Orchestra.
Decir que este es el grupo de Emir Kusturica es mitad cierto y mitad injusto, ya que la banda fue creada en 1980 en Sarajevo y el director de cine se les unió en el 86, primero como bajista y luego como guitarrista. La No Smoking Orchestra fue liderada desde sus comienzos por el Dr. Nelíe Karajilic y en sus orígenes eran un grupo de Punk. Si bien usaron el Rock and Roll para volverse músicos de culto, luego se transformaron en la expresión más significativa del "Nuevo Primitivismo", la así llamada resistencia cultural que estalló en Yugoslavia una vez ocurrida la muerte del Mariscal Tito. La banda está integrada por Emir Kusturica en guitarra y composición, su hijo Stribor en percusión, Glava Markovskien en bajo y balalaika, Her Dralle Draugentaller en teclados, Zok Milosevic en acordeón, Dejan Sparavalo en violín, Alexander Balavan en tuba, Nesho Petrovic en saxo y el Dr. Nelle Karajilic en voces. Su .último disco es Live is a miracle grabado en vivo en Buenos Aires en 2005. Relacionado directamente con Kusturica está Goran Bregovic, quién fue llamado por el cineasta para componer la música de su película "Tiempo de gitanos". Fue entonces cuando Bregovic se reencontró con sus raíces balcánicas y comenzó a explorar en la música de los zíngaros. La música de Bregovic es tan intensa y explosiva como la situación que se ha vivido siempre en los Balcanes. Sus composiciones están inspiradas en el más salvaje y vivo folklore balcánico, al que sabe dotar de una perspectiva contemporánea, fruto, sin duda, de su pasado como miembro de uno de los grupos más famosos del Rock yugoslavo. Su primer disco apareció en el 90, ha colaborado con Iggy Pop, Cesária Evora, Scott Walter y los actores Isabel Adjani y Johnny Deep. En Rumania encontramos a Fanfare Ciorcalia que proviene de un pueblo de 400 habitantes al este del país, una región aislada donde la música se ha transmitido de generación en generación desde tiempos inmemoriales. Descubiertos por dos jóvenes alemanes apasionados por la música gitana, editaron su primer CD en 1998 y desde entonces no han parado de recorrer el mundo e incluso hicieron la banda sonora de la película "Contra la pared" de director germano-turco Fatih Akin. Por su parte, en Hungría, aunque los gitanos no constituyen un grupo étnico homogéneo, su música tiene un estilo unificado. Su tradición musical original fue principalmente vocal y los animados bailes y lentas canciones líricas que relataban las vicisitudes de la vida, han ido acompañadas sólo por el chasquear de los dedos, el golpeteo rítmico de las tapas de las cazuelas, cántaros de agua y cucharas; no se utilizaban otros instrumentos musicales. A finales de la década del 60, los gitanos jóvenes empezaron a utilizar la guitarra como parte del renacimiento folclórico húngaro de la época. El grupo gitano contemporáneo más conocido Kalyi Jag, canta fundamentalmente en romaní y emplea utensilios del hogar junto con el doble contrabajo, el contrabajo oral, la guitarra y la percusión.






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