martes, 4 de noviembre de 2008

Australiana Aborigen



La música tradicional de los aborígenes australianos tiene mucho significado en su cultura y es usada en cada momento de la vida para enseñar lo que debe conocerse sobre su cultura, su origen y su lugar en el mundo de la naturaleza. Desde pequeños animan a los niños a cantar y bailar en las tareas diarias. En la pubertad aprenden las canciones sobre las plantas y los animales protectores de su clan, la historia y la mitología del grupo al que pertenece y su linaje. Estas canciones tienen fórmulas melódicas específicas que las distinguen de las canciones de otro grupo. Basada en una tradición oral, la música es aprendida por imitación y pasada a la siguiente generación sin notaciones escritas. Cuando los jóvenes son solteros aprenden canciones alegres que son el medio de comunicación de hospitalidad básico para el grupo. Cuando se casan y tienen más responsabilidades, las canciones de Karma son la parte central de su educación, y muchas veces, su fuente de poder. Su madurez puede ser medida por el conocimiento esotérico adquirido a través de las canciones. Su honor en parte se basa por el dominio de las canciones secretas sagradas del clan. El aborigen australiano aprende la música naturalmente como algo incorporado a su vida, mientras que en Occidente, la música se disecciona para su estudio, en ritmo, armonía, melodía y orquestación. La música aborigen australiana incorpora una amplia variedad de estilos tradicionales así como una gama de estilos contemporáneos derivados de la fusión con la música europea. Las formas tradicionales incluyen aspectos de ejecución e instrumentación que son únicas en las diferentes comunidades así como elementos que son comunes y que se han extendido a la mayor parte de la isla y más allá. Además de estas tradiciones indígenas y de su herencia musical, luego de producirse la colonización europea en el Siglo XVIII los músicos e intérpretes aborígenes australianos han adoptado e interpretado muchos de los estilos llegados de Occidente, a menudo combinándolos con los instrumentos tradicionales. Así mismo, artistas no indígenas han adoptado estilos e instrumentos autóctonos australianos en sus trabajos. Dentro del Rock, el Country, el Hip Hop o el Reggae, se destaca la participación de muchos músicos aborígenes. Un clan particular en la cultura aborigen puede compartir canciones conocidas como Emeba, Fjantangarri, Manikay y otros términos natales. Las canciones son sobre el clan y las historias de familia, las controversias y las relaciones sociales. Las letras, o Yiri en la lengua Walpiri, se relacionan con la ciencia oral y la narración, y a menudo describen como fueron creados los rasgos de la tierra. El Karma es un tipo de literatura oral que cuenta un relato religioso o histórico. El Bunggul es un estilo de música que nació alrededor del río Mann y que se reconoce por su lírica intensa que a menudo relata historias de viajes épicos. El Kun-borrk se distingue por la introducción de Didgeridoo, seguido de percusiones y coros. Las diferentes tribus se valieron de varios instrumentos para crear su música. Según la información obtenida de fuentes escritas y grabaciones disponibles, existen más de treinta instrumentos aún vigentes, así como otros elementos para producir diferentes sonidos. 
El Didgeridoo es considerado el instrumento nacional de los aborígenes australianos. Está formado por ramas ahuecadas por las termitas que allí anidan. Se la corta a un metro y medio aproximadamente y se le afinan los extremos. La presión constante del aire se mantiene soplando por la boca y aspirando por la nariz. El Didgeridoo debe proporcionar una nota constante sobre un tono profundo. El tono del timbre no es constante ya que puede variar cambiando la forma de la cavidad de la boca o la posición de la lengua. En la construcción de los instrumentos se utilizan los recursos que están al alcance de la mano. La mayoría son ideófonos. Hay un solo ejemplo de membranófono, como son los tambores hechos con la piel de lagartos o iguanas, cuya parte inferior está formada como la boca de un cocodrilo. De los instrumentos aerófonos sólo se conoce el Didgeridoo, cuyos intérpretes más famosos incluyen a Djalu Gurruwiwi, Mark Atkins y Joe Geia, así como el músico blanco Charly Mc Mahon. En la tradición australiana no se han utilizado instrumentos de cuerda. Muchos australianos aborígenes han alcanzado la prominencia dentro del mercado musical actual, como Jimmy Little (Pop); Yothu Yindi (Rock), Troy Cassar-Daley (Country) y el grupo de música alternativa Warumpi. La película Wrong Side of the Road, de 1991, le dio una amplia difusión a la música australiana más allá de sus fronteras.





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